La vida ordinaria de Finn

Capítulo 8 [Actualizado]

Finn se levantó del suelo limpiándose las lágrimas y los mocos que salían de su nariz. Comenzó a caminar fuera del cementerio yendo a su hogar. Él pensaba en muchas cosas a la vez, se seguía sintiendo culpable aun sabiendo que no era su culpa que ambos hayan muerto ¿el odio que le tenía a su padre se apagaría?

De repente sintió un pequeño empujón, al ver era un niño orco de piel verdosa, lo estaba abrazando, Finn intentó quitárselo, pero otros tres niños orco lo taclearon haciéndolo caer, los niños reían mientras lo abrazaban.

-Hola tío Finn – dijo uno sonriente.

-Niños – respondió mientras miraba al frente y vio a una mujer orco en cuclillas delante de él.

-Te quieren mucho para que seas tan seco – la voz de la mujer era dulce pero fuerte.

Finn con esfuerzo se levantó cargando a los niños que colgaban de sus brazos y cuello además del que no lo soltaba de la pierna.

-Hola Genara.

Finn le ofreció la mano, pero Genara la rechazo para darle un fuerte abrazo dejándolo sin aire aun con los niños encima.

Finn se logró soltar de Genara y con un suspiro comienza a caminar hacia su casa, los niños no se bajaban por nada.

Al llegar, Ivy y Arán estaban preparando la mesa para poder comer.

-Ah, cariño – Arán fue con Genara para darle un beso mientras esta lo cargaba, la diferencia de tamaños era bastante evidente.

-¿Desde cuando eres un taxi hermano? – Ivy lo veía riendo.

Los gemelos estaban en una esquina con un vaso de agua cada uno mirando al suelo, pero al escuchar la voz de Ivy mencionar a Finn ambos subieron la mirada viéndolo cubierto de niños.

-Bien chicos abajo, ya me cansé – su tono de voz era suave haciendo que los niños lo dejaran, pero el de la pierna no se soltaba.

Finn se hincó y se puso frente a él.

-Hola Tyler, yo también te extrañé – Finn le sonrió honesto haciendo que el tímido niño sonriera también y se fuera con sus hermanos.

-¿Quiénes son los dos elfos de allí? – Genara señaló a los gemelos bajando a Arán.

-Mis hijos, adoptivos, que quede claro.

-¿Hijos? – Un hombre de piel pálida, cabello grisáceo con algunas canas salió de una de las habitaciones mirando a Finn, El hombre era alto, pero por la edad se notaba una pequeña joroba que lo hacía más bajo.

-Hola papá – Finn miró al hombre serio.

-Hijo, aun estas enojado conmigo, ¿Verdad? – el tono del hombre era melancólico.

Finn no dijo nada, solo con un ademan ordenó a los gemelos que se acercasen y se presenten.

El padre de Finn sonriente se presentó a el mismo como Luke Kayser.

-Bueno, hay que desayunar – dijo sin mirar a su padre.

Sus hermanos lo tomaron del hombro para que fuera con ellos a la cocina.

-Bien, empezaron con el pie izquierdo, al menos has el intento Finn, por favor – exclamó su hermano

-Sabes que no estará aquí mucho tiempo, trata de ser más blando con él – le siguió su hermana

Finn suspiró y sin decir nada tomó unos platos llenos con comida y fue a la mesa dejándolos frente a su padre y a los gemelos.

Sus hermanos llegaron después sirviéndole a él, a los niños de Arán y su esposa.