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- ¿Detectan una presencia?-nos preguntó papá.
-No, al contrario yo no logro detectar nada -dijo mamá mientras preparaba la cama.
-Siento que ese ser va y vuelve -me explique.
-Podria tratarse de neurosis histérica. Eso explicará las múltiples personalidades y las alucinaciones -dijo papá.
-No lo creo. Cuando toque el sillón escuché una vez decir "Vete" algo así. No recuerdo bien - les conté.
-No puedo explicarlo. Mi corazón me dice que debo creerles. Yo escuché esa voz, con mis propios oídos. Pero lo único que logro sentir es su miedo. No logro ver más allá -dijo mamá.
Me acosté al lado izquierdo de la cama mirando a la pared, la cama es muy chica y no es nada cómodo. Cerré mis ojos intentando reconciliar el sueño y que mi mente olvidará lo de hoy. Sentí como mamá se acostó a mi lado y acariciaba mi cabello.
-No creo que pueda dormir tan lejos de ti -dijo papá.
-Cuando regresemos a casa te recompensaré -dijo mamá.
-Que feo que digan eso frente a su hija -me queje con un puchero.
- ¿Por que debo dormir con usted, señor Warren? - Henry pregunto removiendose incómodo, dos hombres en una cama chica, no es agradable.
- No vas a dormir con mi hija
Solté un risa.
- Bueno, lo intente.
(...)
W
illow se despertó a media noche. Su garganta estaba seca y necesitaba tomar agua, sin despertar a Lorraine, salió de la cama y se acercó a la puerta para salir.
Camino por los pasillos, mentiria si dijera que el pasillo no daba miedo, más bien estaba temblando para que no se le apareciera nada en medio de la noche. No sabía cómo se encendían las luces de esa casa y tuvo que bajar las escaleras a oscuras tratando de no tropezar.
-Maldigo por no haber llevado agua -murmuro para sí misma.
Fue a la cocina y sin hacer ruido, agarro un vaso y lo lleno agua de la llave. Estaba acostumbrada en tomar agua de poma, pero ellos no tenían así que le toca beber de la llave.
Bebió agua y evitaba ver su reflejo en el vidrio donde se podía ver el patio de la casa.
Lo devolvió en el mismo lugar y al momento de girarse...
-¡Ah! -soltó un grito al ver a Henry.
-Lo siento, lo siento -se disculpó por aparecer repentinamente -. Es solo que escuche un ruido.
- Pero no llegues así.
Hubo un silencio incómodo para ambos chicos, y el lugar no ayudaba.
- ¿Te espero? - preguntó el
- Te lo agradecería - Willow le sonrió.
- Está casa da miedo, será porque no me acostumbro - dice mirando a los lados.
- Tienes razón, tampoco me acostumbro.
- Oye - Willow lo mira - No es el mejor momento de decirlo pero...me gustas y...
Los gritos de Janet se escucharon por toda la casa, haciendo que ambos jóvenes se alarmaran. Salieron de la cocina para después subir al segundo piso siendo seguida por el chico. Cuando llegaron, los Warren estaban ahí.
-¿Que ocurre? -preguntó la joven al ver cómo la Sra. Hodgson intentaba quitar las cadenas de la habitación de Janet.
-Hay alguien ahí -dijo la Sra. Hodgson.
Ed intento quitar las cadenas mientras los gritos de Janet seguian.
-No puedo abrirla - sollozó la Sra. Hodgson.
-Ve por la llave - Henry miró a Peggy mientras empujaba la puerta.
Lorraine se acercó a la puerta y miro por el pequeño hoyo a Janet que la estaban asfixiando con las cortinas.
Peggy llegó con las llaves y abrieron la puerta, todos ingresaron y ayudaron a la niña.
-¡Había alguien! Yo lo ví, lo ví con mis propios ojos, y le hizo esto a mi niña -dijo Peggy llorando mientras acariciaba su mejilla.
Willow se levantó del suelo y con su mirada inspeccionó el lugar, se detuvo al ver cómo una cruz se movió como si las hubiesen volteado.
•••
Willow se habia propuesto en cuidar a Janet mientras los demás se iban. Sus padres se fueron a una cafetería junto a Maurice y una señora que le cayó mal. Peggy salió a comprar las cosas para hacer la comida.
-¿Margaret viene hoy? Le tengo que contar muchas cosas.
-Entonces esperemos a que venga. Tu mamá dijo que tus hermanos iban a venir a visitarte. Tal vez vengan en una hora -en eso se escuchan unos golpes en la puerta -. O en un segundo.
Janet fue abrir la puerta y fue recibida por sus hermanos.
-Chicos. Les presento a Willow Warren -dijo Janet con una sonrisa.
-Hola -dijo Willow con una sonrisa -Ya está listo el desayuno. Pueden sentarse ¿Si?
-Mucho gusto Willow. Soy Margaret, y ellos son Johnny y Billy.
-Hola -saludaron ambos.
Ella respondió lo mismo con una sonrisa. Les sirvió el desayuno y de repente la puerta se abre ingresando Henry.
- Chicos. El es Henry Lennox.
- Hola - los niños lo saludaron.
Henry los saludo con una sonrisa y asentimiento con la cabeza.
Los niños se fueron a jugar en el patio. Willow se quedó sola con Henry.
- Dime si vas a hacer mi novia si no ni para meterle ganas a la carrera.
Willow le sonrió.
- Cuando terminemos con esto, hablaremos sobre un posible noviazgo - dice mirando esos ojos azules.
- Nada de posible...tu Willow Warren, serás mi esposa....
