Cap1: El día en el que nos conocimos

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Eran las siete de la mañana en una pequeña casa en una ciudad. El despertador sonaba indicando que ya era la hora de despertarse de nuestra protagonista. Ella bostezo y se levantó con energía para luego ir al baño de su casa. Su nombre es Diane, una chica de 20 años muy alta y atlética, con un cuerpo bastante trabajado y muy envidiable. Ella se peinó y recogió su pelo en dos coletas como ella hace siempre. Salió del baño y volvió a su habitación para comenzar a vestirse. Se vistió con un pantalón largo de chándal con un top negro que realzaba sus pechos, se puso un abrigo de chándal que se dejo abierto y se puso unas deportivas. Bajo las escaleras deslizándose por la barandilla hasta llegar a la planta baja para ir a la cocina. Ahí se encontraba su tía Matrona preparando el desayuno.

Matrona: Tan puntual como siempre Diane.

Diane: *se sienta a la mesa* pues claro Matrona, no quiero llegar tarde a mi primer día de clases.

Matrona: *sirve la comida en un plato* ¿No te puedes vestir mas femenina? Pareces una atracadora.

Diane:*empieza a comer* ya sabes que no Matrona. A mi me gusta vestirme así y punto.

Matrona suspiro mirando a otro lado y fue a las escaleras para subir.

Matrona: Hoy me voy por mis viajes de negocios. No quemes la casa mientras no estoy.

Diane: que si, ya lo sé. Bueno, me voy que llego tarde.

Diane terminó su desayuno, agarró su mochila y salió de su casa para ir al instituto. Este era un mundo mágico donde muchas especies viven en comunidad. Ella era una gigante y ellos tenían prohibido andar en su tamaño por las calles, solo lo podían hacer en lugares indicados, pero a ella no le importaba. Llegó a su instituto a tiempo antes de que sonara la campana. Nada más llegar, empezó a escuchar comentarios hacia ella.

Chica:¿Has visto a esa marimacho?

Chico:¿Por un segundo pensé que era un hombre?

Ella simplemente los ignoró y continuó con su camino hasta su clase. Dentro del instituto podía ver hadas revoloteando, demonios y diosas mostrando sus poderes. Ella estaba alegre de estar en un lugar nuevo y poder comenzar de cero. Llegó hasta la entrada de su aula y tocó a la puerta. La puerta se abrió y salió un señor con el pelo rosa y un gran bigote.

Cusack: Dejame adivinar, eres Diane, la nueva alumna de mi clase.

Diane: Así es, soy yo.

Cusack: Muy bien, pues pasa para que te presentes. 

Cusack entró de nuevo en la clase y ella le siguió. Dentro del aula, Cusack se fue hasta su mesa y Diane se colocó delante de la clase. Se empezaron a escuchar susurros por la clase y obvio eran sobre ella. Diane los miró a todos con una mirada imponente y temible, mostrando autoridad y miedo. Los susurros cesaron y aquellas personas miraron a otro lado asustados.

Cusack: Atención clase, ella es vuestra nueva compañera. Puedes presentarte.

Diane: Pues yo me llamo Diane y me encanta hacer deportes. Y aunque no lo parezca soy simpática, pero mas os vale no meteros conmigo…

Cusack: Pues muy bien, puedes sentarte ahí atrás.

Diane asintió y caminó hasta su mesa. Las mesas en el aula estaban pegadas en dos, cada uno tenía un compañero a su lado, y Diane no era la excepción. A su lado, había una chica bajita con un lindo pelo castaño, tenía una sudadera que tapaba su cara, pero se podía ver un poco su pelo.

Diane: Un gusto pequeña, soy Diane.

?: *fría* Hola, ¿qué tal?…

Diane: Vaya, tienes la voz un poquito grave para ser chica.

?: Ahí está el problema de siempre…

Diane: ¿Perdón?

King: *se quita la capucha mostrando su rostro* No soy una chica…

Diane: ¿Qué?






-Pues aquí está el primer capítulo de está historia. Se que tengo otra pendiente pero tengo demasidas ideas y aun quiero perfeccionarla. Pero de momento os dejo con esto. Espero que haya gente quenle guste y lo disfrute, nos vemos 🤭-

Para el amor no hay diferencias 💖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora