Metanoia [Yaguchi Kyousuke]

🍊Capítulo 1🍊

Pov Narradora

Los chicos de ambos clubes se encontraron justo frente a las duchas. 

Ambos discutían por quien debía de utilizarlas primero. Siempre era la misma discusión. 

Ambos capitanes se encontraron y se miraron con la típica mirada aterradora.

—Dejanos bañar primero, Katashi.—El capitán del club de fútbol se dirigió a ti con superioridad.

Lo miraste de mala manera. 

—¿Debería?—Estabas molesto—Creo que esa no es la manera de hablarle a alguien superior que tu,  Taiki. 

—Idiota, te crees mucho, ¿verdad?—Taiki se acercó a ti. 

Ambos equipos se acercaron intentando que sus capitanes no formarán una pelea, cosa que era muy común. 

Tomaste al contrario del cabello, obligándolo a levantar el rostro. 

—No lo creo, lo soy. Y ya es hora de que te grabes eso en la cabeza. 

El contrario soltó una cachetada en tu rostro, sin embargo, no soltaste tu agarre.

Tu mirada no se despegaba de tus ojos, el contrario tenía suerte de que las miradas no matasen. 

Yaguchi, en el fondo, suspiró ya irritado de las innecesarias peleas que solían formarse. 

El chico se acercó a ambos y los miró con la mirada más dulce que podía hacer. 

—Oye, Taiki-kun. Deberíamos dejar que ellos usen las duchas primero. No perdemos nada con esperar un poco. Por favor. 

Rodaste los ojos y soltaste al contrario. 

—Lo dejaré hasta aquí porque eres lindo, mocoso. En cuanto a ti—Miraste al capitán—mas te vale recordar lo que te he dicho, porque la próxima te lo recordare con un golpe.

—¿Eso es una amenaza?—Respondió el.

—Una promesa.—Le corregiste. 

La sangre de Yaguchi hervía pero no podía hacer nada. Se había convertido en alguien muy diferente a lo que era en realidad, todo por ser mejor que su primo. 

—¡Bueno, chicos! Ya escucharon a la naranja parlante—lo miraste de reojo— vamos.

Luego de un largo rato, los del club del voleibol salieron. 

Yaguchi, como siempre, espero a que los demás se bañaran para poder hacerlo el. Su homofobia era de otro nivel. 

Entró a la ducha y pensó en Toono. Por alguna razón imaginó que él lo estaba viendo en ese momento. Se sintió incomodó y quiso taparse sus partes, aún así no lo hizo. 

—Que lindo trasero. 

Yaguchi giró y se apartó el pelo mojado para poder ver a la persona. El joven alargó el brazo para tomar su toalla y cubrirse, pero tu se lo impediste. 

Viste como el chico mordía fuertemente su labio inferior. Estaba tratando de contenerse. 

—¿Q-que haces aqui?

Con ese tono no podía engañar a nadie. 

—Olvidé mi celular, lo iba a recoger mañana...—Recorriste su cuerpo con la mirada—Que bueno que no lo hice—Rozaste su pezón con tus dedos. 

Yaguchi puso ambas manos en tu pecho y te empujó con todas sus fuerzas. 

—¡Degenerado de mierda! ¡No me toques! 

Te echaste a reír. 

—¿De que te ríes, imbécil?  

—De que logré que me mostraras tu verdadera personalidad. 

El chico te miro perplejo. 

—¿C-cómo es que...?

—Es muy obvio. Tus sonrisas no se reflejan en tus ojos. Tu tono es increíblemente falso, sinceramente, esa voz "tierna" es horrorosa. 

—N-no se lo puedes decir a nadie. 

—¿No? ¿Quien me va a detener? 

Yaguchi se acerco y levanto la mano para poder golpearte. 

Tomaste su muñeca. 

—¿Que me das si te guardo el secreto? 

Tus ojos estaban llenos de malicia y burla. 

—¿Q-que quieres? No te vayas a pasar de la raya. 

Te acercaste mucho más al chico y este se apartó con una mueca de asco.

—Te pediré lo que yo quiera. Aunque hay tantas cosas...—murmuraste—Lo decidiré luego. Por hoy estas a salvo. 

Soltaste a Yaguchi y te fuiste del lugar, mientras que el contrario te insultaba de mil maneras diferentes en su mente. 

Te largaste feliz. 

Por fin lograste ver al chico que tomó por el cuello de la camiseta a Tamura. Muy pocos tenían el calor de hacer eso. 

El te encantaba, pero detestabas que fuera tan falso. 

Planeabas divertirte con él y tal vez, en el proceso, aprenda a que debe de dejar de fingir. 

Sentías que necesitaba a alguien que ayude y querías ser tu ese "alguien". 

Bye...