¿My opportunity?

Ep.5 ¿?

Narra Pedri.

—Pedri..— me llamo.— tú también me gustas.

Esa confesión me dejó descolocado y pensando toda la noche y el sueño que tenía anteriormente se había desvanecido totalmente.

Y creo que eso fue un balde de agua fría para mi borrachera.

Aún no puedo creer que fui tan idiota al haberle confesado mis sentimientos estando en un estado en el que no podría pensar con claridad.

A ver mis sentimientos hacia ella son reales pero decirlo borracho estaba totalmente fuera de mis planes.

Ella dormía plácidamente dándome la espalda.

Seguramente amanecerá con dolor de cabeza en el que tendrá ganas de tomarse todas las pastillas.

Estuve pensando en eso prácticamente las últimas horas que quedaban de madrugada.

Y en ningún momento pude dormir, maldito insomnio.

Siempre solía pasar y bebía un té pero esta vez ah sido un fallido.

Seguramente no sirves para hacer té.

O seguramente deberías callarte.

Olivia murmuró algo mientras se despertaba y yo empecé a fingir que dormía.

En cualquier segundo se me saldrá la risa, nunca aguanto estar serio.

—Pedri se que estas despierto.— hablo adormilada.

Abrí los ojos lentamente haciéndome el recién despierto.

—¿Te duele la cabeza?.

—No, bueno, no tanto.— explicó.— no es necesario las pastillas.

Me levante para ir a su lado de la cama y hacerla parar.

Cuando me dijo que no le dolía tanto la cabeza en realidad decía "Pedri mi cabeza va a estallar".

—Si no te doy la pastilla Sira va a matarme por dejarte con el dolor de cabeza.

Ella puso los ojos en blanco siguiéndome.

—¡Enhorabuena!, ¿Pedri sabes cocinar?.— pregunto Pau.

Todos estaban en la cocina pero al parecer nadie lograba decidirse que comer o más bien quien cocinaría.

Y aquí su servido tendría que al menos hacerle unos huevos.

—Pedri si nos haces de desayunar prometo ayudarte con mi hermana.— dijo Sira haciendo que su hermana se pusiera como un tomate.

—Pensándolo bien.. me apetece hacerles de desayunar.— reí al sentir que Oliv me daba un golpe en el brazo.

Empece a ponerles mejor cereales con leche.

Por que según ellos su estómago pedía a gritos comer.

—Oh, Dios Pedri eres el mejor cocinando ¿podrías darme la receta?.— ironizó Ferran.

—Si hubiese sido así buscaba enseguida el cereal.— me vio mal Gavi.

Gavi se había pillado de Valeska y Valeska de el.