Después de tantos años estamos aquí sentadas en el mismo lugar.
Suena irónico hasta una burla del propio destino, es como recordar esa vez.
En donde nos encontraron fuera de las habitaciones y fuimos a detención, la inquietud de ser expulsadas, una al lado de la otra.
Pero el destino fue cruel, al menos con ella misma, estaban sentadas una delante de la otra, solo que la gran diferencia era que ella misma era la directora y ella era una madre que vino con su querido esposo a traer a su hija al instituto donde pasaron gran parte de su adolescencia.
Y ella tiene que poner la mejor sonrisa de todas para no mostrar su dolor, tal vez la soledad le sentaba bien pero no estaba sola del todo tenia una amante pero no era nada oficial, en esos momentos oscuros de soledad siempre estaba allí, con ella.
Pero ahora se tiene que concentra en el presente.
- entonces simplemente estamos honrados de que su hija esté aquí - sonrie
- eso es estúpido - dijo la niña
- merlina tu no lo entenderías- dijo la mujer
- oh claro porque no soy la gran Mortica Addams - se queja Merlina
Morticia se estaba por quejar pero su esposo habló
- mi dulce tormenta, queremos que te sientas en un lugar especial y seguro y que menor lugar que nunca más, que esta al mando de Larissa Weems - dijo sonriendo
- gracias Homero - dijo con una sonrisa Larissa
- no es nada - sonrie el
Merlina se cruza de brazos
- supongo que ya quieres ir al ophelia hall, y conocer a tu nueva compañera - mira a Merlina
- solo quiero ver cuanto me dura esta basura vamos - dijo seria
Todos se levantan y siguen a la directora, al cabo de un rato llegaron al último cuarto y al abrir el cuarto entraron
- bienvenida a ophelia hall merlina - dijo sonriente
Merlina mira el lugar
- es muy doloroso de mirar
Una rubia la mira y sonrie
- bueno te presento a tu nueva compañera Enid ella es merlina, merlina ella es Enid- las presenta
- hola roomie - le intenta abrazar
Merlina se aleja
- entiendo sin contacto- se aleja sonriendo
- Enid porque no le muestras el colegio a merlina, y pasan por el uniforme
Enid asiente y se lleva a merlina
Homero solo sonrie y se va de allí sin decir nada fue seguido por Pericles.
- es extraño que no diga a donde se va - dijo la azabache
- supongo tal ves se distrajo, es extraño estar en esta habitación - dijo mirando
- Larissa, es raro que todo se vea igual..
- tal vez - la mira a los ojos
Morticia le sonrie un poco.
Las dos sintieron que el tiempo parecía regresar hasta su época adolescente como si fuera un deja vu, con sus uniformes, y la peculiar mirada de Larissa acompáñame a hacer esto.
Volvieron a la realidad.
Pero como si el destino fuera cruel...
- quieres escapar un ratito - dijo Mortica
Larissa sonrio inconscientemente
- sabes que siempre es un placer romper las reglas contigo
Mortica sonrie y se acerca a tomarle la mano, empezó a caminar junto a ella.
Hasta que salieron sin que nadie se diera cuenta, fueron al bosque.
Caminaron un poco más hasta estar completamente solas
Larissa sentía nervios de lo que podría pasar, tenía miedo a joder la situación y no verla nunca más.
Era gracioso pero ahora gracias a su hija podría verla más seguido
Morticia la palma de la mano contraria, esa calidez aun estaba presente.
Larissa sentía que se hiba a desmayar
Morticia podía sentir como la contraria se ponía nerviosa.
Y eso siempre le gusto, ponerla nerviosa total nunca hacia nada para defenderse.
Porque no disfrutar de eso aquí mismo.
De acerco a la contraria lo suficiente para ponerla nerviosa.
Sus latidos se sentían.
Con sus dos manos agarro el rostro de la más alta y la acerca a ella misma, estaban muy serca lo suficiente como para besarse.
Larissa sintió que su cuerpo la estaba por traicionar.
Podía ver que su pecho se saldría, que todo se iría al carajo.
Por otro lado recordó que siempre le dio el gusto de ponerla nerviosa, entonces porque no devolverlo, estaba sonrojada, pero lo pensó un poco, debía de darle uso a su altura beneficiosa.
Agarra de la cintura de la más baja, la empezó hacer caminar atrás y rápidamente la puso contra un árbol, eso dejó confundida a la más baja y sorprendida.
Larissa se acerca a su rostro lo suficiente como para besarla pero sonrie.
- es extraño que estemos en una situación al revés no crees - se burla
Las mejillas de morticia le dieron un poco más de vida.
Podía sentir su respiración, podía admirar esos ojos y podía sentir las inmensas ganas de besarla.
Larissa estaba reprimiendo las ganas de besarla, la tenia a su merced