Esa chica. (Kuroshitsuji)

Capitulo 4 -Esa chica, en buenas manos.

_____________'s P.O.V.

-¿Cómo es eso de que estuviste encerrada en el sótano? ¿Inconsciente? ¡Ahora tendrás que contármelo todo, jovencita!- me dijo papá parado en la puerta.

-...- no supe qué hacer, me quedé en blanco, nunca le había contado nada a mi padre sobre todo ese asunto del bullying y ahora me estaba exigiendo que lo hiciera...

-________, estoy esperando.- volvió a decirme, se oía muy serio.

-E-es que... Papá...

-No hagas que pierda la paciencia, _________...

-Uh... ¡¡La chica que me tiró el café encima es una ricachona abusadora y me hace bullying hace años!! ¡¡Tiene esos tres mayordomos y ellos me encerraron en el sótano, me taparon la boca con algo que me durmió y cuándo desperté estaba sola ahí, mi sweter ya no estaba y no podía salir!!- solté todo a gritos, mis ojos comenzaron a llenarse de lágrimas.

-¿Por qué nunca me hablaste de eso?- papá se veía decepcionado.

-Es que te preocupas tanto por poder mantenerme y sacar adelante la cafetería que... No quería ocasionarte más problemas...

-Debiste decírmelo.

Papá se acercó a mí y me dio una suave caricia en la cabeza para luego tomarme la temperatura con su mano.

-Sí, estás enferma... Te quedarás en la casa unos días, cerraré la cafetería hasta que mejores y luego te cambiaré a otra escuela.- me dijo.

-¡No!- me alarmé -¡No puedes hacer eso! ¡Tienes que trabajar en la cafetería! ¡Y no quiero cambiarme a otra escuela! No ahora, ya conozco todas las instalaciones y tengo un amigo, no quiero tener que comenzar de nuevo por culpa de esa...

De la nada, Sebastian me abrazó por la espalda. Voltee para verlo, el me mostró una expresión tranquilizadora y me sonrojé, volviendo mi mirada al suelo.

-Yo puedo cuidar de __________ mientras esté enferma, señor.- le dijo a papá - Solo le pido que no la cambie de escuela, acabo de llegar y me inscribí en esa escuela para estar cerca de ________, no podría cambiarme de escuela por lo pronto y no quiero estar lejos de ella.

-Mmm...- papá lo pensó por un momento, viéndonos a Sebastian y a mí con seriedad -Está bien -sonrió -, creo que la dejo en buenas manos, pero no permitas que esa chica abuse de nuevo de mi hija Sebastian.

-Le doy mi palabra de que eso no pasará.

Sebastian me soltó y se acercó a papá y ambos se dieron un apretón de manos. Después de eso nos sentamos a cenar los tres juntos. Yo estaba sentada en el medio y casi no hablaba, más bien escuchaba a papá decirle a Sebastian que debía ir a la escuela y luego de clases venir a cuidarme para que él pudiera trabajar en el café sin tener que preocuparse mucho. Después de la cena, Sebastian se despidió de papá con un apretón de manos, yo lo acompañé hasta la puerta de la cafetería.

-Hasta mañana, __________.- me dijo.

-Hasta mañana...- no sabía cómo debía despedirme de él, por lo que me sentía avergonzada e incómoda.

Sebastian no dijo nada y me besó la mejilla tiernamente, bastante cerca de mis labios a decir verdad. No pude evitar sonrojarme y llevar mi mano al lugar dónde había dejado aquel beso mientras lo veía irse.

Sebastian's P.O.V.

La lluvia había parado hacía un par de horas. Camino a mi casa, saqué el peluche de gato que _________ me regaló más temprano y comencé a jugar con él cómo si fuera un gato de verdad. Algo en mi interior se sentía diferente ahora... Me siento preocupado por ________, espero que su enfermedad no sea grave y que esté mejor pronto. Creo que comenzaré a ir a su casa antes de clases para ir a la escuela junto con ella ni bien esté mejor... ¿Qué es este sentimiento tan extraño?