࣪'𝐮n bes𝐨 𝐞s 𝐞l c𝐨mienzo d𝐞l c𝐚nibal𝐢sm𝐨'

¹.🥧 _╭╯🍎🧾◫₊˚

# _En aquella ciudad, su perdición encontró,
El pecador que su mundo transformó.
El camino del bien, aún persistía,
Pero con un pecador a su par, seguía.

El amor, un regalo maravilloso sin pecado,
A veces, se torna distinto, obsesionado.
Cometiendo pecados tras pecados, sin cesar,
Por amar a su amado, sin temor a ser descubiertos, su amor era más fuerte, sin dudar.

Los gritos desgarradores no le inquietaban,
Solo le daban fuerza, con cada salpicadura de sangre, se llenaban.
Creía hacerlo por amor, o eso pensaba,
Pero lo que tenía era peor, una obsesión desatada.

Todo por la risa melódica de su chico,
Quien iluminaba sus días, con su dulce música, único.
Teniendo bajo control a la bestia sangrienta,
Porque su amor era más fuerte, su
pasión violenta._

Luzbel lucifer Finalmente, llegó a Nueva Orleans, Louisiana, específicamente en el año 1906, ya que se había mudado con su madre, quien ahora era una mujer cansada que pasaba la mayor parte del tiempo en su hogar, tranquila. Su único hijo vivía a solo dos cuadras de distancia, por lo que estarían cerca. Sin embargo, él no sabía mucho sobre ese lugar, ya que había vivido principalmente en Londres, Inglaterra, con su padre. Recientemente, su padre lo había decepcionado al engañar a su esposa(madre de lucifer) por dinero, lo cual disgustó al rubio, pero decidió ignorarlo. Sabía que era mejor separarse antes de tener una familia falsa. Ahora se encontraba en un lugar desconocido sin saber qué hacer. Estaba preocupado por encontrar trabajo a tiempo y también por los nervios de su madre, quien buscaba una iglesia a la que ambos pudieran asistir, ya que eran una familia religiosa.
[...]
Caminaba sin rumbo fijo por la ciudad, siendo nuevo y apenas conociendo los alrededores. Su objetivo era explorar el lugar sin llamar demasiado la atención, pero eso resultó en vano debido a su cabello dorado, su piel blanca como porcelana, sus mejillas ligeramente rosadas, sus labios color rubí y su traje blanco con un moño negro, lo cual atraía las miradas de los desconocidos y los habitantes de la ciudad.

"Oh, supongo que esta es la florería", murmuró para sí mismo mientras observaba la tienda llena de diferentes especies de flores de todos los colores. Después de unos minutos, salió del lugar con un hermoso ramo de flores mientras disfrutaba del aroma. Sin prestar atención a su entorno, chocó con un extraño y algunos pétalos cayeron al suelo. Se recompuso rápidamente y se disculpó con el joven con el que chocó. "Lo siento mucho, no te vi", dijo apenado mientras observaba al chico de cabello castaño, ojos marrones y un traje de color rojizo oscuro pero opaco. Lo más inquietante era su sonrisa, que no desaparecía en ningún momento.

"Oh, no pasa nada, tampoco te vi, así que fue un accidente de ambos, ¡jaja!", respondió el chico con entusiasmo, como si nada pudiera quitarle esa sonrisa de oreja a oreja que acompañaba su extraña vestimenta.

Luzbel decidió sonreír torpemente mientras intentaba esconder sus nervios por la aterradora personalidad de aquel desconocido. Intentó suspirar para hablar sin miedo con el chico, ya que no debería juzgar por las apariencias, o eso siempre decía. Tosió torpemente mientras notaba que tenía la atención del chico más alto. "En todo caso, me retiro", dijo nerviosamente mientras escuchaba cómo el otro tarareaba una melodía extraña y lo observaba con una sonrisa mientras se alejaba. Ese chico era realmente extraño.

Por otro lado, Alastor se sintió atraído por aquel rubio nervioso, ya que nunca lo había visto antes en la zona. Con cuidado, se dio la vuelta y acomodó su ropa para caminar con paso firme, sin quitar la sonrisa de su rostro. Estaba planeando qué hacer con el chico. Tal vez salir a cazar ciervos, como en los viejos tiempos, sería divertido...
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Espero os guste la historia, no tengo tanta imaginación por lo que tardaré en actualizar
¡Hasta pronto!