࣪'𝐮n bes𝐨 𝐞s 𝐞l c𝐨mienzo d𝐞l c𝐚nibal𝐢sm𝐨'

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Alastor se encontraba en un parque, más allá del cual se encontraba el bosque donde la mayoría de los ciervos eran cazados. El joven de traje rojo estaba parado, tarareando con su típica sonrisa espeluznante que causaba escalofríos a la mayoría, excepto a Luzbel, quien creía que dentro de cada ser humano había una chispa de felicidad que podría cambiar a cualquier pecador en el mundo. A Alastor no le importaba en absoluto, solo se centraba en que su canal de radio funcionara y en seguir con su trabajo.

Sentía una presencia que lo observaba cada vez que podía, especialmente por las tardes y casi nunca los fines de semana. El chico castaño estaba tomando nota de todo, ya que la cacería comenzaría pronto. Suspiró con disgusto mientras caminaba lentamente, alejándose del lugar, escuchando cómo la persona lo seguía. Estaba contento de saber quién sería su futura presa.

Por otro lado, Luciferl se había enterado de varios asesinatos en la zona, la mayoría por canibalismo, según las mordeduras encontradas en cada víctima. Ninguna de las víctimas tenía relación cercana con las demás, lo que dificultaba el trabajo de la policía, especialmente porque los cadáveres estaban llenos de gusanos y no había ADN del misterioso asesino.

Esto llamó mucho la atención de Luzbel, por lo que se empeñó en intentar ayudar a ese pecador que cometía tan repugnantes homicidios. Sospechaba de Alastor, por lo que lo seguía cada vez que podía, observando cada uno de sus movimientos y si tenía comportamientos agresivos, pero solo notaba que era amable.

—Es tan extraño, supongo que él no será... —El de tez blanca habló en voz baja para sí mismo, mientras estaba demasiado lejos del castaño como para que lo escuchara. Quería pensar en algo, pero no sabía qué hacer para acercarse al muchacho y dudaba en dar el primer paso, y más aún, dudaba de Alastor.

[Crack...]

Se escuchó como una rama se rompía lejos de él, lo que hizo que mirara hacia adelante en busca del origen del sonido que lo tomó desprevenido. Notó a un venado que lo observaba, lo que hizo que Luzbel bajara la guardia. Luego sintió la respiración de alguien detrás de él, lo que le puso la piel de gallina y una ola de electricidad recorrió su columna. Saltó en su lugar y miró hacia arriba.

—¡Santos cielos! —exclamó.

Por otro lado, Alastor se dignó a reír levemente. Estaba detrás del joven sin que se diera cuenta, como un cazador con su presa, pero esta vez actuaba como una presa más. Notó la asustada cara pálida del menor y se dio cuenta de que le había dado un buen susto.

—Oh, disculpa por asustarte. Noté que estabas algo... nervioso —dijo Alastor, mientras su sonrisa se agrandaba levemente y pronunciaba la última frase con un tono extraño y alegre, como siempre. Esto hacía que Luzbel dudara, y si Alastor fuera el asesino, sin dudas estaría muerto...

—Para nada, solo estaba paseando hasta que me asustaste —respondió Lucifer, acomodando su ropa y buscando algo para cortar el contacto visual. Sentía una extraña vibra en el ambiente y notaba cómo la sombra del chico se hacía cada vez más grande, sin forma humana. Parpadeó y se dio cuenta de que la sombra volvía a ser normal, sin deformidades ni nada por el estilo, lo que lo alivió un poco.

—Escuché sobre los asesinatos en la zona y eso me tiene algo... asustado —confesó, mientras notaba cómo el más alto sonreía y asentía, mirándolo fijamente, como si lo estuviera analizando. Pero no le dio tanta importancia cuando escuchó que hablaba contento—. Es verdad, pero por ahora no tengo sospechas de nadie. ¿Tú sospechas de alguien?

Preguntó mientras caminaba lentamente, alejándose del parque, y era seguido por el rubio de melena, quien intentaba seguirle el ritmo como podía. Luzbel pensó en invitarlo a tomar un café para ganarse su confianza, ya que siempre es importante ganarse la confianza de la víctima.

—¿Me acompañas a tomar un café? —habló rápidamente, sin dejar que el otro respondiera su pregunta inicial. Solo quería saber si podía dar el siguiente paso.

—Por supuesto, y respondiendo a tu pregunta anterior, no sospecho de nadie por ahora, pero es mejor estar acompañado que solo... ¿no es así, señor? —quedó en silencio, ambos. Luzbel intentaba recordar si alguna vez había oído el nombre de aquel muchacho, pero nada venía a su mente. Intentaba indagar o saber si había aparecido en algún periódico, pero nada.

—Dime, Alastor, cariño, ¿y tú cómo te llamas? —habló contento, mientras por fin llegaban a su destino. Abrió primero la puerta para dejar pasar a Alastor, quien se sentía algo avergonzado de que hicieran algo así por él. Entró rápidamente, esperando a Alastor, observando aquella cafetería con estilo antiguo.

—Me llamo Luzbel, dime cómo desees...—
quedó impresionado con aquel lugar, mientras el de traje rojo lo miraba por detrás, sonriendo y caminando hacia una mesa lejana pero vacía, sin casi nadie que los molestara, excepto los meseros. Tomó una silla y la alejó levemente de la mesa, mientras miraba a su nuevo amigo o, más bien dicho, su futura presa.

—Por aquí, Luzbel. Siéntate y cuéntame sobre ti, si no te incomoda — dijo cortésmente una vez que el rubio se sentó. Alastor acercó la silla levemente a la mesa y se sentó frente a él, esperando pacientemente cualquier información que su nuevo amigo, o mejor dicho, su presa, quisiera compartir.

—No hago nada en especial, trabajo en una florería y cada fin de semana voy a la iglesia. ¿Y tú, en qué trabajas? —preguntó el castaño, notando rápidamente que el chico rubio era quien lo seguía a escondidas. Lo descubrió al escuchar que iba a una iglesia y al notar el aroma a flores que siempre lo acompañaba. Un buen olfato para un depredador.

—Bueno, eso es interesante. Yo, en cambio, trabajo como locutor en la radio —dijo Alastor con orgullo, mientras escuchaban los pasos del mesero acercándose para tomar su orden. Ambos pidieron café, aunque Alastor prefirió uno amargo y Luzbel optó por uno suave junto con un cheesecake. Sus gustos eran diferentes y eso se notaba. El rubio sonrió mientras se acomodaba para continuar con la amistosa charla con su nueva presa.
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              ⏜ luzbel lucifer es el nombre del rubio, solo intercambio los nombres para que no se repitan (seguro se dieron cuenta jsjs);
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       ¿Que les parece? ¿Es muy corto el capítulo?
       ¡Si gustan intentaré hacerlos más largos!