Tiradera // BSD

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Las noticias explotaron de norte a sur y de este a oeste cuando Osamu Dazai hizo pública su infidelidad en plena boda de otro amigo suyo.

Sin embargo, ningún maldito reportero era capaz de fotografiar bien al amante y seguía siendo un completo desconocido.

Evento tras evento, su nombre nunca bajó del top 3 en redes sociales y únicamente existía una persona más relevante que él en todo el continente. Chuuya se mostraba distante, los medios de comunicación le sorprendían al final de su jornada laboral pero no lograban sacarle ni un simple saludo o insulto.

Lo veían caminando de un lado a otro con seguridad, sus pasos no dudaban a resonar por todo el edificio y el director del noticiero matutino le recibió con los brazos abiertos.

Simplemente quería investigar más sobre el amante de su ex-esposo, necesitaba hacer una pequeña cosa antes de mover un solo dedo. Fue idea de Kouyou recurrir a un reportero de confianza, y Akutagawa conocía a uno bastante bueno.

Tocó la puerta del estudio un par de veces mientras se recargaba en el marco, viendo que el albino estaba tan inmerso en su propio trabajo que no le prestó atención a él.

El olor a perfume parisino le hizo levantar la mirada por unos segundos.

— Ahora no, tengo que ter... ¡Ay madre santa!– gritó alterado por la sorpresa — Señor Nakahara C-Chuuya, ¿a-a qué d-debo del grandísimo honor?

— Dime sólo Chuuya, y vengo porque ahora trabajas para mí, niño– respondió sonriente, pudo ver la explosión mental de menor — Déjame explicarte antes de que colapses ¿bien?

— P-Por supuesto qu... ¿¡Akutagawa!?

— Cuanto tiempo sin verte, Jinko– saludó el azabache tranquilamente, se dio la libertad de pasar como si nada — Te traje un café, doble caramelo justo como lo recuerdo

— No entiendo nada, por favor, ayuda

— Relájate, ¿eres reportero, correcto?– preguntó, Atsushi asintió mientras aceptaba la bebida — Bien, hablé con tu jefe y ahora trabajas para mí

— ¿P-Pero por qué? Es d-decir, ¿ne-necesita que haga algo en especial?

— Osamu Dazai tiene un amante, Osamu Dazai es un infiel de mierda y necesito ciertos datos sobre él para poder continuar con un pequeño proyecto que tengo en mente, pero no puedo acercarme yo ni mi familia porque de inmediato las cámaras se nos van encima– explicó con su típico movimiento constante de manos — Lo que quiero de ti, es que me ayudes en esto

— ¿Y precisamente t-tengo que ser y-yo?

— Atsushi Nakajima, 18 años con empleo de medio tiempo en una empresa que te debería pagar hasta el triple con todo el trabajo que haces, tienes dos hermanos, Izumi Kyouka que va en sexto grado, Miyazawa Kenji que va en octavo grado... ¿quieres más razones?

— ¿P-Puede ser más específico, por favor?

— Necesitas este trabajo– intervino Akutagawa — Trabajas día tras día en un infierno laboral que te sobreexplota y la competencia lentamente hará que te terminen despidiendo dentro de varios meses, ¿prefieres quedarte aquí o hacerle caso al consejo de un amigo de tu infancia?

— Sé que tus hermanos son lo mejor en tu vida, quieres protegerlos y darles todo lo que necesiten y que nunca les falte nada– mencionó el pelirrojo — Comparto el sentimiento, puedo entender que te estás esforzando mucho... eres de buen corazón y por eso te escogí a ti

Atsushi dudó un par de minutos, pero, para ser honesto, ¿quién en su sano juicio sería capaz de rechazar la oferta de trabajo más ridículamente sencilla de su vida? Además de ganar lo suficiente, iba a estar disfrutando de lo que hacía.