XXIII: Luna Maximoff

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El dia que tanto esperaban llegó...Pero este día los tomó con una gran sorpresa, según el doctor la última vez que Irina fue al doctor este les indicó que la bebé vendría al mundo en una fecha en específico, tranquilos con esto Iri y Pietro volvieron a casa y siguieron haciendo sus rutinas por las siguientes semanas mientras esperaban pacientemente a que la pequeña llegara al mundo.

Aquel día todo estaba muy tranquilo e iba con un rumbo completamente normal, Pietro se había despertado temprano para ir a entrenar mientras Iri practicaba un poco de yoga y se encargaba de las flores del jardín, las margaritas que había sembrado cada vez crecían más y eso la hacía feliz por el hecho de poder mantenerlas vivas y lindas.

Irina comenzó a sentir una que otra molestia en la parte baja de su barriga pero no le prestó mucha atención y siguió con su rutina normal, pasado el mediodía Irina se encontraba meditando debajo de un árbol del jardín mientras la molestia se presentaba otra vez pero aún más fuerte.

—Pequeña no me digas que...—Habló Irina viéndose interrumpida por un pinchazo en su espalda el cual causó que dejara salir un leve quejido.

Intentó recuperar la concentración en su respiración pero fue en vano porque el molesto dolor seguía ahí, luego de unos pocos minutos el dolor se desapareció un poco y ella pudo volver a casa para leer el libro de maternidad el cual les había servido de mucho para su proceso de embarazo.

Lost Souls (Pietro Maximoff)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora