Tan preciado como la libertad

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—Uraraka Ochako, omega,16 años. Posee el don de Zero Gravity. Está en estado anémico, baja de peso; varias heridas superficiales por todo su cuerpo, la más grave está en el abdomen, posiblemente una apuñalada; no existe daño interno, pero si pérdida masiva de sangre.

Se mostró las fotos de las heridas. Spinner inmediatamente frunció el ceño—: ¿Qué causó todo esto? ¿Estuvo luchando?

Doctor negó con la cabeza—: No sabemos exactamente qué ha pasado —dijo— lo único que sabemos es que esta muchacha necesita ayuda de inmediata.

—Dentro de su cuerpo circulan varias sustancias que paralizan o estimulan el ciclo, un agente depresor de quirk y veneno; este último es de efecto prolongado —Toga enarcó una ceja.

—Calculo que ya ha pasado un mes desde que fue expuesta a estos venenos perniciosos. A menos que se le suministre el antídoto a tiempo, curar sus heridas y desintoxicarse a fondo, ella morirá dentro de los próximos días.

El repiqueteo repetitivo de las uñas de Dabi sobre la mesa creaba un eco sordo en la sala.

La habitación era clara, pero fría; paredes pintadas de un gris profundo y melancólico que se desvanecía en un brillo mantecoso; sentados en las frías y duras sillas de metal y con el aire cargado de tensión a su alrededor.

No dijeron ni una palabra, eran una mera fracción de estadística de vida, que importaba.

Shigaraki reconocía las drogas, eran de uso común de Ujiko. Lo que indicaba que el grupo estaba siendo perseguido por los suyos, mejor dicho, por su maestro.

—Katsuki Bakugo, omega, 16 años. Posee el don de la explosión. Su estado es demasiado grave. Magulladuras y cortes terribles surcan su cuerpo, pero la herida más atroz es las quemaduras en sus brazos —la imagen en la pantalla reflejaba quemaduras de tercer grado extendiéndose desde el hombro hasta la punta de los dedos, tan graves que no se podían visualizar con tranquilidad.

Doctor informó que Bakugo estaba sufriendo los mismos efectos tóxicos que Uraraka, pero muchísimo peor. Su cuerpo no podía soportar el veneno y estaba colapsando. Los análisis revelaban disminución del pulso cardíaco y respiración dificultosa, además de un deterioro acelerado de todos los sistemas corporales.

—Se están muriendo —Toga intervino sin un rastro de emoción.

—¿Te alegra? —preguntó Spinner de reojo.

Toga alzó los hombros.

—La niña se llama Eri, anteriormente fue rehén de Chisaki Kai. Tiene seis años y aún no se presenta. Está baja de peso y con altas posibilidades de tener anemia. Más allá de eso, no tiene problemas de salud. Está claro que fue cuidada durante toda la estancia con el grupo.

La diapositiva pasó a Hawks.

Dabi frunció el ceño con un odio incontrolable. Shigaraki tuvo que contener su aroma para evitar ahuyentar a los demás, pero el enojo que bullía en su interior era imposible de disimular. Toga y Spinner fingían, pero en realidad estaban a punto de explotar con la simple mención del héroe.

Todo el cuarto se encontraba en un tenso y frágil silencio.

—Keigo Takami, conocido como Hawks. Tiene 23 años y su don es alas rígidas. Es un áureo; se conoce muy poco de ellos y son escasos.

—¡¿UN ÁUREO?! —Toga enarcó las cejas y miró al Doctor y luego a Dabi.

—Es una reliquia entre todos —dijo Spinner con sorpresa.

—Si, son tan escasos que si se encuentra alguno son vendidos o marcados de inmediato —acotó Doctor.

—No puede estar hablando en serio —susurró Dabi, tratando de contener la furia que lo embargaba. Recordaba con toda claridad cómo Hawks afirmó que era un omega, incluso anunció ser el compañero de él y Shigaraki. No podía creer hasta qué punto las mentiras de Hawks se extendían.

Wicked Game | Dabi x Hawks x ShigarakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora