Realidad Paralela I KATSUDEKU I

Capítulo 11

La gente a mi alrededor tardó un segundo en procesar lo que estaba pasando, pero en cuanto se dieron cuenta comenzaron a gritar y corrieron a buscar refugio, algo que yo no podría hacer.

Blink tenía super velocidad y antes de que terminará de dar mi primer paso tendría los cuchillos atravesándome como a un puerco.

—¿Por qué? —Pregunté para ganar tiempo.

¿Dónde estaba Katsuki? ¿Le había pasado algo? ¿Por qué tardaba tanto?

—Él llegara aquí pronto—Me dijo, sabiendo exactamente en quien estaba pensando. ¿Acaso también leía la mente?

Efectivamente Katsuki apareció al segundo siguiente con una explosión que debió de haber casi calcinado al villano, pero cuando el humo se disipó, no había señales de él.

Un rayo verde brilló y lo siguiente que vi fue a Katsuki siendo lanzado por los aires hasta que chocó contra un árbol.

—Debiste que quedarte en tu departamento, viejo—Se burló Blink

—Maldito bastardo—Se quejó Katsuki, mientras lanzaba otra explosión que volvió a fallar.

A pesar de que sus heridas habían sanado, no estaba en su mejor forma, y era unos milisegundos más lentos de lo normal, algo que podría costarle hasta la vida si es que Blink se atrevía a terminar el trabajo.

El villano rió, divertido, mientras esquivaba las explosiones sin siquiera sudar. Katsuki no era un rival para su velocidad.

Y yo mucho menos.

No era más que un civil, un civil bebé que únicamente podría ver porque si me atrevía a entrometerme en la pelea no iba a hacer otra cosa más que estorbar.

Saque mi celular para hablarle Eraser, pero cuando estaba por apretar el botón de llamar, el aparato fue arrebatado de mis manos

—No te recomiendo hacer eso—Dijo Blink antes de estrellar el celular en el piso.

—¡Aléjate de él! —Gritó Katsuki

—¿O sino qué? —Lo provocó Blink, mientras se ponía detrás de mí y me pasaba un brazo sobre los hombros.

Blink era de mis misma estatura y casi misma constitución, pero si seguridad en si mismo y personalidad te absorbía.

— Si le llegas a tocar un solo cabello me asegurare de que el Tártaro se sienta como el cielo cuando termine contigo.

—Que considerado de tu parte, Katsuki. Aunque me parece un poco curioso lo mucho que has cambiado. Antes eras el perpetrador.

—Tú no sabes una mierda sobre mí, bastardo.

—Créeme, Kacchan. Sé todo sobre ti

¿Era mi imaginación o Blink conocía personalmente a Katsuki? Le hablaba con la misma confianza de un mejor amigo.

A Blink jamás en mi vida lo había visto en el manga. Él apenas apareció en los últimos tomos y fue una sorpresa porque el mundo entero ya sabía que el jefe final era el All For One y la liga de villanos.

Tampoco apareció en los recuerdos de infancia de Katsuki, y yo lo recordaría muy bien porque me sabía su historia como si hubiera estado allí.

—No tienes derecho a decirme de ese modo—Gruñó Katsuki, rojo de ira

—¿Y el mocoso de aquí sí? Es solo un sin quirk. Un inútil

Eso sí dolió, pero trate de no tomármelo personal, al final de cuentas yo no era de ese mundo.