🌸❯ 𓏲 ❛ 𝗗𝗲𝘀𝗰𝗼𝗻𝗼𝗰𝗶𝗱𝗼𝘀. | 𝘚𝘰𝘯𝘪𝘤 𝘹 𝘓𝘦𝘤𝘵𝘰𝘳𝘢.

13: una noche fuera.

POV _____:

Terminando la "pequeña" merienda de antes (o mejor dicho, el gigantesco banquete), los tres quedamos reposando por lo magnífico que estuvo durante un ratito, ¿Uno de ellos habrá cocinado? ¿O pidieron algún delivery? No importaba, mi paladar fue bendecido con semejantes manjares.

Ninguno dijo una sola palabra en todo el almuerzo. Creo que es el almuerzo... No tengo idea de qué horas serían.

Aburrida del silencio opté por comentar algo. ── Cielos, estoy tan satisfecha. ── Casi erupto escandalosamente, pero pude detenerlo poniendo mi mano sobre mi boca. Sólo porque estoy en casa ajena lo hago, normalmente suelen regañarme...

── Estoy igual. ── El rubio habló compartiendo mi opinión, y un tanto agotado (quejándose) se paró del suelo ── Limpiemos este desastre ¿Si?  ── Asentimos a la par junto al pelinegro. Comenzó a recoger algunos trastes, palillos, vasos con té, etcétera.

Sonic y yo imitamos su acción, barrí las migajas del suelo y limpié el lugar donde comimos. Al azabache le tocará lavar la losa sucia, así que fue directo hasta la otra habitación del hogar.

Un poco apresurada boté la basura en su lugar, y comí las sobras que quedaron encima de la mesa a escondidas, no pude evitarlo.

En un santiamén estuvo todo terminado en el living/comedor, Flashy fue a su cuarto, diciéndome que podía hacer lo que quiera con tal de no aburrirme esperando a que su compañero finalizara, básicamente, diciéndome que me sintiera cómo en mi casa; pero no podía quedarme de brazos cruzados mientras él aún seguía ocupado.

Insatisfecha me asomé en la entrada de la cocina por si Sonic necesitaba ayuda con algo, me acerqué hasta su persona y le toqué la espalda con mi dedo índice para preguntar.

Siento que aún estoy en deuda con él... No estaría demás aportar un poquito.

── ¿Estás bien? ¿No quieres ayuda? ── Me miró de reojo resfregando la esponja entre los platos, deteniéndose al momento. Tenía su playera arremangada, exponiendo sus fornidos brazos, se marcaban varias cicatrices en estos, ¿Todo su cuerpo estará así?

── Bien. Yo lavo, tu secas. ── Declaró y prosiguió con lo suyo. Amarré mi cabello con una liga que traía en mi muñeca (bastante desordenado si me lo preguntan), subí mis mangas para no humedecerlas y agarré un paño. Él me iba indicando el lugar donde dejarlos.

Tal vez era impresión mía, no quisiera parecer una paranóica, no obstante no podía dejar de sentir como me clavaba la mirada cada vez que le daba la espalda... Me ponía los nervios de punta.

El silencio invadía fuertemente la habitación, cada vez que conectabamos miradas la situación se convertía inmediatamente en algo bochornoso.

Pasaron los minutos e hicimos un buen trabajo en equipo, no nos demoramos demasiado en acabar, cuando ya quedaba lo último un ligero rozamiento ocurrió entre nosotros, nos tocamos la mano queriendo agarrar el mismo objeto.

Era tan helada, varios escalofríos recorrieron mi espalda al contactar con su piel. Quité mi mano rápidamente con tal de que no dijera nada.

No quería verlo a la cara, así que observé un punto ciego de la habitación mientras secaba.

De reojo noté cómo ponía las manos en sus bolsillos. ── Hoy hizo más frío de lo habitual. ── Habló al azar, actuó con normalidad ante esto. Que bueno que no reaccionó mal, apenada le dí la razón diciendo "sí, es verdad", y fui a guardar el vaso culpable de la reciente fricción que sentí. Abrí la estantería de arriba con lentitud, éste fue acoplado correctamente.