Senji Muramasa Alter - Alter Ego

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"No soy el creador de espadas Senji Muramasa

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"No soy el creador de espadas Senji Muramasa.

Tampoco soy el mago Shirou Emiya.

¿Ideales? ¿Justicia? Dejé eso hace tiempo.

Hace tiempo pensaba que era un creador, pero me di cuenta de que solo soy una espada.

Soy una espada empuñada por una diosa vengativa.

Soy el filo que corta a los traidores de la diosa alienígena.

Vivo para matar. Fui creado para matar.

Yo... Solo soy un destructor"

Nombre verdadero: Senji-Muramasa/Shirou Emiya

Alias: Susanoo-No-Mikoto, Hoor.

Género: Masculino

Rasgos: Divino, Servant, Pseudo-Servant, High-Servant.

Alineamiento: Legal-Neutral

Identidad

Originalmente, era solo un herrero de Japón, que fue invocado en el cuerpo de un mago sin nombre. Un capricho del destino que fue creado para matar al malvado Shirou Amakusa Tokisada debido a que sus espadas tenían la cualidad de matar a seres como ese hombre.

No era un Servant que debía existir, no era un Servant que un master pudiera invocar. Pero el mundo lo invocó porque era el Servant más barato y útil para detener a Amakusa.

No era ni Senji Muramasa ni Shirou Emiya, era un nuevo ser, alguien digno de ser un Espíritu Heroico. Pero aun así, una vez cumplió su propósito, su Origen Espiritual quedó condenado a desaparecer, ni el trono de los héroes ni la fundación que se encargaba de proteger la humanidad registraron su Origen Espiritual, pero una diosa lo salvó.

Una diosa de otro mundo que había perdido a su hermano. La diosa alienígena.

Esa diosa lo observó durante los eventos de Shimosa, del cómo sus espadas eran capaces de enfrentar a las maldiciones de su Apóstol Douman y cuando vio como la vida de ese herrero se consumía, lo salvó de la muerte.

¿Lo salvó por piedad o fue solo porque lo consideró útil en sus planes?

El herrero nunca recibió una respuesta.

Su Origen estaba destruyéndose, pero la diosa lo salvó y volvió su sirviente.

Y así nació el tercer y último Apóstol de la diosa alienígena.

Senji Muramasa.

Un ser que ha abandonado todo lazo con la humanidad y la justicia para volverse un arma contra la historia humana correcta.

Como Apóstol, ha dejado atrás sus ideales y orgullo de creador centrándose en su deber como Apóstol.

Mientras Rasputin cuidaba de los Masters y Douman de los reyes de los Lostblets. Muramasa debía cuidar de los Lostbelts en sí, los árboles de fantasía y los habitantes de estos.

Fate\ Fan ServantsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora