Sabes lo que le pasa a un alfa cuando pierde a su omega

Mio

Podía escuchar la pelea desde mi habitación, sé que ellos podrán detener a Steve, no por nada somos el equipo más poderoso.

Aun así, mis nervios me han hecho preparar mi armadura, lista para ir a ayudarlos en cualquier segundo.

Aunque el problema ahora es... ¿quién va a ayudarme a mí?

- ¿Qué haces aquí Sharon? -

La maldita me apuntaba con un arma, tenia una enorme sonrisa de victoria y detrás de ella 3 sujetos hacían portales, idénticos a los de Strange.

Debí suponer que solo jugando sucio es que Sharon lograría su objetivo.

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-Steve...capitán, necesito que me escuche-

Habíamos conseguido encadenarle y sedarle, se que esto no lo detendrá, solo hay una opción, pero es demasiado arriesgado para Tony acercarse ahora.

-somos sus amigos capitán-dijo Peter, quien había logrado romperle un brazo, fue el único capaz de hacerlo, aunque fuera por accidente.

Pero eso nos permitió ganarle esta batalla.

-Steve, se lo que te esta pasando, esto es por Tony verdad-

Mi pregunta le hizo rugir, pero había un nuevo sonido, mas bajo y casi triste.

-su omega esta...-

-es mejor que dejen ir a Steve, a menos que quieran que Stark tenga una bala atravesando su cráneo-

De un portal apareció Sharon Carter, sosteniendo a Tony, quien estaba encadenado y se notaba algo mareado.

A su lado alguien sostenía a Wade, quien tenía una serie de disparos en todo su cuerpo, y por su estado parecía "muerto".

-SEÑOR STARK...-grito Peter, tratando de acercarse, pero esa psicópata le disparo.

Fallo solo por unos centímetros, pero entendimos su advertencia de igual forma.

- ¿Qué es lo que quieres Carter? -exigió saber Ross, quien seguramente estaba formulando como 100 planes para dispararle a esa loca.

Estaba por usar mi magia para detener el tiempo, cuando me di cuenta de algo.

Steve había parado de moverse, miraba fijamente a Tony, y respiraba algo pesado.

Así que eso era....

Detuve el tiempo solo unos segundos, y quite a hulk de Steve, si mi instinto es correcto, creo que hemos conseguido una segunda oportunidad.

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En un segundo estaba sobre Steve, tratando de detenerlo, y al siguiente instante estaba detrás de Strange, protegido por un escudo.

Mientras escuchaba los gritos de los agentes pidiendo clemencia.

Ver a Steve asesinar fue un espectáculo tan grotesco que me hizo volver a la normalidad, tuve que cubrir a Peter, no quería que viera eso, el pobre chico se tapó los oídos y se aferró a mí, cubriendo su visión con mi pecho.

Sharon parecía en shock, al igual que Tony.

Cuando los gritos cesaron una espada atravesó el cuello de Sharon, un golpe limpio y sin piedad.