Mire mis manos, las cuales ya temblaban sin parar, mi respiración comenzaba a acelerarse, mientras intenta inhalar y exahalar. Todo mi alrededor se encontraba en un gran charco de sangre, incluyendo mi cara, ropa y manos.
Seguía encima de aquel jugador, siendo la responsable de que este ya no estuviera vivo, siendo que fui conciente de lo que hice, cerré mis ojos con fuerza a más no poder, comenzando a sollozar y temblar del terror por lo que sucedio.
Sentí unas manos detrás de mi que rodeaban mis hombros con gran fuerza, -Tranquila, tenías que hacerlo. -
Lo mas claro, era Usagi. Quien seguía abrazandome por detrás, su mano se encontraba en uno de mis brazos, en un intento de consolarme, y su cabeza pegada a mi espalda.
El tiempo en esta posición paso, seguía en un trance sin saber que hacer, hasta que Usagi se despegó de mi y oir sus pasos alejarse, decidiendo quedarme aquí. A lo segundos volvi a escuchar sus pasos. Esta vez se incorporándose a lado mío.
Acerco su mano hacia mi, indicado que tomaron aquello que me ponía frente mio. -Toma, creo que... mereces quedartelo.... Es como el esfuerzo que hiciste por esto.
Alegó, entregandome la carta, por la cual jugué, cinco de treboles.
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El camino hacia el lugar de Usagi fue silencioso, sientiendose en el aire la pena que se sentia por lo sucedido, el miedo apoderandose. Cuando llegamos a lugar el silencio sigio, me tumbe al piso con toda la emcion revuelta, el temor era lo principal, el cual hacia que sientiera una horrible sensacion en el estomago.
Usagi se quedo afuera, informo que haria un fogata, para que comieramos y pudiera tranquilizar lo que senti.
Me reincorpore del piso, y sali en una caminata rápida, visualice a Usagi en aquella fogata, no tardando a verme, quien quizo hablar pero la interrumpi.
