Missing Piece. |DKBK AU| [ESP]

epílogo.

«Katsuki»

Desearía haber podido tener más voz para llamarle.

Más fuerzas para protegerle.

Más corazón para no dejarle poner su cuerpo a costa del mío. 

Lo hubiese deseado tanto.., para no tener que estar justo aquí, ahora, llorando por él.

Lo dije una vez, pero ahora no hay mejor momento para gritárselo a Dios.

¿Por qué mandaste como mi angel a la misma persona de la que sabías que terminaría enamorándome?

-Por favor.., no te vayas... 

Tomo tan, tan fuerte su cuerpo, su rostro, rogando, suplicando, orando a Dios que por favor le ayude a abrir sus ojos...

-Izuku, n-no me dejes... por favor.., no me dejes...

No puedo respirar. No puedo, no siento un solo gramo de aire entrando a mis pulmones, no siento uno solo de mis huesos, de mi piel, nada.

-¡Ayuda!

Desearía tener más voz.

Desearía que por favor esta vez sí sea suficiente para que alguien sí me escuche...

-¡Ayuda! ¡Ayuda, por favor!

Grito tanto como puedo, con voz tan clara como tengo, con una maldita garganta que no está ayudando putas nada...

Tomo fuerte su rostro, aún cuando otra parte de mí me grita que no lo apriete, que no le dañe más, que cuide su cuerpo para cuando vengan a hacerle despertar...

Mis manos temblorosas buscan su pulso, como un maniático, como un loco asustado, temeroso, con un maldito pánico que no me está ayudando absolutamente nada.

Pero no lo encuentro.

No encuentro su pulso, y no puedo dejar de llorar mientras le ruego a Dios con toda la fuerza de mi corazón que solo sea yo y mis manos inútiles quienes no pueden encontrar los latidos de su corazón...

Tomo su rostro, acaricio su piel aún perfecta, aún con tantos golpes, con tantas manchas, con tanta sangre....

-Por favor, no me dejes, Izuku... t-te pido que no me dejes...

»T-tenías razón, ¿sabes? Yo.., yo debí haber hablado contigo antes, d-debí.., escucharte, hacerle caso a tu corazón, yo.., perdón, ¿sí? ¿P-puedes.., por favor, despertar para que me escuches? D-dime que me escuchas, por favor...

»Por favor..., dime que me escuchas...

Busco su pulso otra vez, intento sentir su respiración, intento quitar este maldito chaleco de putas encima para escuchar a su corazón aún funcionando, aún.., aún trabajando para mantener a su alma dentro de su cuerpo...

Mis maldita manos tampoco ayudan mucho, quitando el maldito chaleco de encima, sacándolo y arrojándolo a la mierda fuera del camin-

No...

No, no, no...

Dios, por favor, no me dejes ver eso...

Por favor, no eso...

Un sollozo se atora en mis pulmones, miro para el cielo, me niego completamente a ver aquello.

Abrazo fuerte su cuerpo, negándome tanto, negándole tanto a él, negándome a saber que lo tenía aquí, con él, y yo...

Yo.., no pude escucharlo de sus labios, ni recibirlo de sus manos...

Las lagrimas me corren ahora el puto doble por la maldita cara, mientras mis manos se estiran hasta aquella cajita allí, en el suelo...