💫Bromita de unos seres superiores💫

1.6K 169 24
                                    

֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍

La muerte estaba por entrar a aquella taberna, cuando de repente sintió si cuerpo arder internamente y como su mano cada vez se alejaba más del pomo, para su sorpresa su ropa también había menguado... Se miró las patitas que tenía y desde ahí maldijo a los seres que le crearon, no podía entrar así a la taberna, la imagen de la muerte debía mostrar respeto y miedo, todo lo contrario a la imagen de un cachorro.

En el tiempo en el que la muerte estaba lamentándose fuera, el gato anaranjado había pagado su cuenta y estaba saliendo del bar, encontrándose con aquella cría de lobo, conectando miradas al momento.

-- ¿Que haces tu por aquí, pequeño?

La Muerte estaba pálido como era posible que tuviera tanta mala suerte, se suponía que el Gato estaría dentro del bar por 15 minutos más...

-- ¿No hablas español?

Lobo entiende que no puede hacer otra cosa más que seguirle la corriente al que era su comida, por lo tanto empezó a mover la cabeza no era necesario que dijera una palabra, a aquella segunda pregunta solo negó con la cabeza.

-- Al menos lo entiendes por lo que veo, ¿estás solo?-- Lobo solo asintió con la cabeza y pudo ver la mirada triste y melancólica del Gato.

-- Huérfano supongo, está bien yo también lo soy, no es tan malo como parece-- Lobo solo miró la sonrisa que le había dado el felino.

-- Ven, busquemos un sitio para acampar, ademas seguro tienes hambre-- Lobo solo se quedó mirando a la pata que aquel felino le proporcionaba y finalmente la tomó, le daba curiosidad ver hacia donde acabaría todo esto.

Después de unos minutos encontraron una explanada en mitad del bosque con un árbol en medio y allí se asentaron, el de pelaje anaranjado hizo una hoguera y le dijo al de pelaje gris que no dejara que se apagara mientras él iba a pescar a un río cercano.

El de pelaje grisáceo se quedó pegado a la hoguera, aún le sorprendía lo agradable que era el gato de primeras, el gato solo olía a tranquilidad y leche cosa que no le desagradaba del todo, mantuvo la llama de la hoguera viva y a los minutos regresó el mínimo con 4 peces grandes.

-- Ey, buen trabajo-- el lobato sonrió un poco inconscientemente-- tienes una sonrisa bonita debería mostrarla más-- en eso el lobo vuelve a su cara neutra mientras se preguntaba mentalmente porque había sonreído.

El de botas solo clava los peces en unos palos y los pone a cocinarse en la hoguera, el lobo solo se sienta a contemplar como lentamente los peces van cambiando a un color más dorado.

-- No separas la mirada de los peces, ¿por cuánto tiempo no has comido?-- el de menor tamaño solo se quedó estático y no respondió-- está bien, no necesitas responder...

Con eso el gato se tumba a mirar el cielo estrellado y en ello el lobo ve como en los ojos contrarios se reflejan aquellas estrellas quedándose embobado por instantes, cuando sale del trance vuelve su mirada a los pescados a los que les faltan poco para estar cocinados completamente, luego de unos minutos la muerte va y se acerca al gato.

-- ¿Ya están listos?-- el contrario asiente-- perfecto.

El gato mira con cautela los peces y finalmente toma uno y se lo da al de capucha negra.

-- Ten, es el más grande.

El lobo sólo lo toma y lo huele poco para después darle un bocado con escamas y todo.

-- Lobo, ¡así no se come!-- en eso el gato suelta una risa sonora-- ¿como te vas a comer un pez con escamas? Mira-- El anaranjado toma la piel del animal y la saca con facilidad mostrando la carne del animal.

La muerte había mirado aquello expectante, nunca había necesitado comer pero ahora miraba aquella situación con algo de vergüenza, quizás sea verdad que el Gato con botas se estaba riendo en su cara, pero eso nunca saldría de allí...

El Lobo le quitó la escamas al animal y empezó a comer, estaba rico no lo podía negar, cuando terminó con el que tenía se aventuró a agarrar otro y hacerlo bien desde el principio, cosa que le salió y en respuesta empezó a mover su cola.

Gato miraba entretenido las reacciones del contrario al comer, se le hacía chistoso de cierto modo, al final el de menor tamaño se comió tres pescados mientras que el Gato solo uno.

-- ¿Te has quedado agusto?-- El contrario solo asintió en respuesta-- Me alegra saberlo, por cierto ya es tarde es hora de dormir...-- en eso el de pelaje gris no contestaba-- ¿quieres que te cuente una historia a ver si te duermes?

El lobo sólo daleó la cabeza sin entender, ¿porque una historia le ayudaría a dormir? y la pregunta más importante ¿cómo podría dormir si nunca lo había hecho? En eso el gato se quita su capa y se tumba en el suelo.

-- Ven-- en eso el contrario solo se acerca sin saber las intenciones contraria pero mantiene una cierta distancia.

El Gato solo bufó al ver como el contrario no había entendido a lo que se refería, simplemente lo tomó con una pata y apoyó la espalda contraria con el pelaje anaranjado de su barriga mientras le ponía su capa en modo de manta.

-- A si estarás más calentito-- y el gato no mentía, el lobo amó al momento la sensación de calidez por todo su cuerpo-- bien, creo que te contaré la historia de las judías mágicas, tal y como hice con los tres diablillos.

En eso el Lobo escuchó curioso la historia entera y se preguntó una cosa, ¿el gato habría perdido tantas vidas si no hubiese sido traicionado y obligado a huir? De repente la voz contraria le sacó de su trance.

-- ¿Aún no duermes?-- El contrario solo negó-- sacándole una risa al anaranjado.

-- Si te llego a contar mi historia en el muy muy lejano perdemos toda la noche, será mejor que intentes pegar ojo o mañana estarás agotado-- sonrió para apegarse más y finalmente quedarse dormido.

Lobo simplemente intentó imitar las acciones contrarias, a ver si lograba su cometido, cosa que funcionó...
































































A la mañana siguiente, el felino favorito de todos despertó completamente solo... y donde antes estaba la cría de lobo solo se hallaba una nota donde ponía "Gracias por todo y cuida tu última vida" esto dejó un poco al Gato descolocado, ¿como aquel pequeño sabía que estaba viviendo su última vida?

Por otro lado, Lobo solo esperaría a que su reencuentro con el gato sea lo más tardío posible...

֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍֍

Mi lobito {Pussdeath}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora