El Rescate

CAPÍTULO EXTRA

"sobre cómo trafalgar escapó"

-oe torao... - susurró.

-hmmm... - respondió con un gruñido.

Zoro lo observa de reojo, sonríe como un bobo enamorado y se remueve sobre la cama para abrazar a law quien dormía mirando arriba, re-dibujo sobre sus tatuajes con un dedo.

-hay algo que no me deja dormir, desde hace algún tiempo- susurró, otra vez.

-¿no puede esperar a mañana? - se estiró sobre la cama y luego se giro para quedar frente a zoro - estoy cansado... - mantenía los ojos cerrados y una sonrisa dibujada en los labios.

-hmm... Si, pero entonces no podré dormir - insistió.

-bien bien - estrecho el cuerpo de zoro entre sus brazos - ¿que es lo que atormenta a mi amado roronoa-ya? - preguntó en un tono juguetón.

-aquel día... Cuando te quedaste atrás - zoro alzó la vista, law abrió finalmente los ojos - ¿que pasó?... ¿Cómo fue que lograste escapar? - preguntó.

-hmmm... - law fijo sus ojos en zoro - te lo diré, pero con una condición - una ladina sonrisa se formó en sus labios.

Zoro frunció el ceño.

-¿cuál?

-quiero tu boca... Aquí - indicó con una señal de ojos - te lo diré todo mientras me la chupas - entrecerro su mirada, su voz sonaba sensual en un profundo gruñido.

-eres un maldito loco - zoro gruñó.

-vamos zoro... Deberías agradecerme - con un sensual movimiento meneo sus caderas apegándose al cuerpo de su amado- es doble premio para ti - comento con su habitual arrogancia- podrás dormir y podrás tomar lo que tanto te gusta - susurro muy cerca de sus labios.

-estas loco... - repitió, zoro pareció sonrojar ante la evidencia de su deceo, sus manos se apresuraron a recibir las caderas de law reteniendo su cuerpo cuando finalmente se apegó- cada parte de ti me encanta - aclaró - pero, no por eso me vas a sobornar - contraatacó con una sonrisa igual.

-lo puedes tomar o dejar zoro-ya... - law se separó y alzó la cobija que los cubría a ambos - alguien aquí ya despertó en cuanto escucho tu nombre.

La mirada de zoro fue a parar de forma inevitable bajo las cobijas, saboreó sus propios labios bajo la atenta mirada de law, el pelinegro se sentía tan complacido.

-eres lo único que me la pone así ¿lo sabes? - law sonrio - si lo sabes, entonces debes tomar la responsabilidad zoro-ya.

Alzó la mirada nuevamente, allí, se encontró con esa desafiante expresión en el rostro del pelinegro, sus labios se curbaron en una la fina silueta, en un rápido movimiento tumbo a law sobre la cama, se apresuró a tomar asiento sobre sus caderas y cogiendo sus manos lo acorralo contra la cama.

-Tu ganas- comentó con voz profunda-

El húmedo y profundo contacto entre sus labios fue la distracción suficiente que necesito zoro para amarrar a law al cabezal de la cama, tal y como él lo amarró a él la noche anterior, lo suficientemente fuerte para que no pueda escapar.