El Duque del fuego y el Principe del relampago

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Senjuro sonrió y arropó mejor al pelinegro para acurrucarse también dándole la espalda y dormir un poco

Kyojuro y Tanjiro finalmente habían cruzado a la nación del rayo, era de noche por lo que no podían continuar, estaba demasiado obscuro para seguir ahora, ambos miraban al cielo el cual estaba plagado de estrellas pero sin luna

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Kyojuro y Tanjiro finalmente habían cruzado a la nación del rayo, era de noche por lo que no podían continuar, estaba demasiado obscuro para seguir ahora, ambos miraban al cielo el cual estaba plagado de estrellas pero sin luna

-Extraño la luz de la luna...

-Ya con esta son 4 noches que veo sin luna ¿Que estará pasando?

-Oye Kyo ¿Encontraremos a tu tío mañana?

-Es lo más probable pasaremos la noche aquí, pero logramos llegar bien a la nación del rayo, mañana buscaremos a mi tío por toda la nación si es necesario

-como es el?

-muchos piensan que es un ser agresivo, pero realmente es una buena persona

Kyojuro acomodaba un montón de hojas y un colchón que había comprado antes de irse, haciendo una clase de cama, se recostó y miró al pelirrojo el cual había hecho una fogata

-es pequeño... Ya se..

El burdeos se convirtió en zorro para acostarse a lado de kyojuro y así darse mutuo calor, Tanjiro se había acostado lo más cercano a su pecho, de esta forma dormiría mucho mejor y tomando su forma animal Kyojuro sentía más confianza para mimarlo, Con cada mimo y con cada caricia, Tanjiro movía la cola feliz, claro que le encantaría tener esas caricias en su forma natural, al final de cuentas es lo que pide su hembra interior, bendito sea el remedio que Tamayo le obsequió.

-Pareces más tranquilo ahora Tanjiro-san

Le comenta el ojiplata pues ahora estaba más relajado ante las caricias y menos afectuoso lo que les permitía disfrutar a ambos la compañía mutua siendo ellos mismos

En respuesta a ello tanjiro mueve más la cola feliz, igual en poco tiempo empezó a dormir, el día fue agotador para el

Al día siguiente, el sol los bañaba con sus deliciosos rayos de luz, haciéndolos despertar, Tanjiro aún con su forma de zorro se aparta del agarre del ojiplata,Escuchaba pisadas a lo lejos y eso le alteraba

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Al día siguiente, el sol los bañaba con sus deliciosos rayos de luz, haciéndolos despertar, Tanjiro aún con su forma de zorro se aparta del agarre del ojiplata,
Escuchaba pisadas a lo lejos y eso le alteraba

El príncipe de fuego y el hijo del solDonde viven las historias. Descúbrelo ahora