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🥖

Rodrigo estaba en su habitación, sacando unas cuantas monedas de su alcancía de puerquito, tenia en mente ir donde el panadero y pagarle el pan que había robado, después de todo, no quería seguir escondiéndose de el.

su madre había salido a trabajar, era camarera en un pequeño restaurante, así que la mayor parte de la tarde Rodrigo se quedaba en casa o salía a jugar con sus amigos.

Pero hoy tenia otro plan, y era pagarle al panadero. Así que salió de su casa, caminando lentamente, con la intención de no llegar a la panadería.

Hacia un clima bastante frio, y el cielo empezaba a nublarse, alertando una pronta lluvia. A Rodrigo no le importaba, amaba la lluvia y correr debajo de esta, era de sus pasatiempos favoritos.

Ya a unos pasos de la panadería, Rodrigo trago en seco al no ver al panadero, acercándose mas al local, estando frente a frente de este. 

── ¿Hola? ─ llamo Rodrigo, mirando el local viendo que no había nadie.

O eso pensaba, hasta que una cabellera ondulada se asomo.

── ¡Hola! ¿Qué se te antoja comer, niño? ─ pregunto el contrario, el cual tenia la cara manchada de harina

── Yo... estoy buscando al panadero, debo hablar una cosa pendiente con el...

── ¿mi padre? no esta, se fue a la ciudad a comprar mas ingredientes. Yo soy German, un gusto.

Rodrigo lo miro mal, Ya lo había visto en algunas ocasiones, pero nunca se había animado a hablarle.

── Ten ─ rodrigo le dio unas monedas a German ─ Dáselas a tu padre, dile que son parte del niño que... del.. del niño que...

── ¿del niño del que? ─ pregunto German, algo confundido.

── Ash, tu dile que es de parte del niño al que persiguió por varias calles.

German abrió su boca sorprendido, para luego comenzar a reírse.

── ¿le robaste a mi padre? ─ pregunto, aun riéndose,  Rodrigo estaba rojo de la vergüenza.

── ¡No! ¿por que piensas que lo hice?

── Dices que mi padre te persiguió por varias calles, el solo hace eso cuando algún polizón roba uno de sus preciados panes.

Rodrigo gruño algo molesto, le molestaba la actitud del chico.

── No me caes bien, mejor dame un pan con relleno de mermelada. 

── ¿lo vas a pagar o también lo robaras? ─ pregunto burlescamente German

── ¡Si lo pagare, tonto!

𝐒𝐚𝐯𝐞 𝐦𝐞, 𝐦𝐲 𝐚𝐧𝐠𝐞𝐥. ──── (𝐑𝐎𝐃𝐑𝐈𝐕𝐀𝐍)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora