Something About You | Kodai Tatta

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Tsuki se levantó a la misma hora de siempre, sin embargo ese día se sentía ¿diferente? Quién sabe por qué, en fin, siguió con la misma rutina de siempre antes de entrar al trabajo, se puso a pensar en la universidad, ya era su último año, por lo que estaba emocionada pero a la vez asustada, sabía que al terminar su carrera tendría que buscar salida laboral, con el sueldo de su trabajo de medio tiempo apenas le alcanzaba para vivir, aunque no estaba en malas condiciones económicas, aun así le emocionaba imaginar cómo sería trabajar como psicóloga.
Al irse para su trabajo notó que había un problema con el motor, por lo que lo llevó al mismo taller de siempre, conocía a todos ahí, iba relativamente seguido, ya que era usual que su carro tuviera fallas. Pero notó que había un chico de gorra, que era nuevo, no quería aceptarlo pero se veía muy lindo.

-¿Otra vez el motor?- preguntó el jefe del lugar

-Parece que sí- respondió Tsuki.

-¿No deberías de cambiar el transporte? Hasta ya me aburrí de ver simepre lo mismo- rió un poco al terminar la oración.

Ella rió junto a él -¿Quién sabe?-

-Te soy sincero, yo estoy algo ocupado, ¿está bien si dejo tu carro con el nuevo?- dijo señalando al chico de gorra -sigue aprendiendo pero es bueno, y si hay algún problema yo me hago responsable-

-No hay problema- dijo la chica sonriendo-

-Tatta, ven acá- dijo el jefe.

-¿Me llamó, señor?- dijo el chico, se oía un poco nervioso, quizá porque temía hacer algo mal en el trabajo.

-Atiende a esta chica, al parecer son problemas del motor-

-No hay problema- hizo una reverencia y su jefe se despidió de Tsuki y se fue.

Cuándo se vieron, los 2 sintieron algo extraño, nunca les había pasado, pero la chica habló -¿A qué hora puedo pasar a recogerlo?-

-A partir de las 4:30 p.m estará listo- dijo él aún con un tono nervioso. El chico notó que tenía una gorra de Starbucks en el otro asiento, había uno cercano al taller, ¿Iba a trabajar? Él quería verla otra vez, por lo que decidió ir al lugar en su tiempo libre, si es que trabajaba ahí, que era lo más probable ya que no habían muchos Starbucks en esa área.

-Muy bien- dijo Tsuki sonriendo, cuando vio la hora se despidió rápidamente y se fue, llegaba tarde al trabajo.

Tatta se rió un poco cuando salió, se quedó pensando en ella todo el día.

Cuando era su hora libre, emocionado, fue al lugar, cuando llegó, sonrió al ver a la chica, esta quedó un poco sorprendida cuando lo vio, pero rápidamente fue a atenderlo.

-Bienvenido a Starbucks ¿qué se le ofrece?- dijo la chica sonriendo.

-Me regala un frapuccino de caramelo por favor, tamaño grande-

-Muy bien, ¿a nombre de quién?

-Tatta-

-Lindo nombre- dijo la chica de una manera tan amable.

El chico de sonrojó un poco, Tsuki lo notó, pero sólo soltó una pequeña risa.

-Disculpa, ¿puedo saber el tuyo? Y si no te molesta ¿podemos ser amigos?- dijo con la cabeza baja.

-Tsuki, sería genial ser tu amiga- Ambos sonrieron

Cuando el chico pagó y agarró su bebida se fue a sentar, se le quedó viendo a Tsuki, se le hacía muy linda. Ella lo notó pero no le molestó, cuando tuvo un tiempo libre se acercó a él y le preguntó si se podía sentar con él, a lo que aceptó y empezaron a conocerse. Aquel chico era muy tierno a su parecer, se llevaban muy bien, pero él tenía que volver al trabajo.

-¿Me puedes dar tu número?- dijo Tatta

-Claro- luego se despidieron, él se fue muy feliz. Ella siguió trabajando, y su amigo Arisu junto con sus amigos Chota y Karube fueron a visitarla al trabajo.

-Te estuve escribiendo, ¿qué pasó?- preguntó Arisu.

-Estaba trabajando- dijo Tsuki con algo de ironía - ¿qué pasó?

-Me quedé sin techo-

-Bien hecho- dijo Chota.

-No lo animes, busca empleo- respondió Karube.

-Tú estás desempleado- dijo Tsuki entre risas luego de revisar su teléfono.

-Es diferente- respondió el rubio.

Los 4 hablaron sobre temas variados, Tsuki les comentó sobre el chico de gorra que conoció anteriormente.

-Ya era hora, ojalá y funcione, no quiero que te conviertas en la señora de los gatos- dijo Karube riendo.

-Que no se note tu emoción- habló Arisu.

Los chicos se fueron, ya que ya estaba muy lleno y ya habían pasado mucho tiempo, se despidieron y todo estaba normal. La chica fue al baño, pero cuando salió del cubículo se fue la luz, se le hizo raro, pero cuando salió vio que no había nadie, se preocupo, buscó por todo el lugar pero nada. Fue cuando vio que afuera estaban sus 3 amigos, corrió para abrazarlos.

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Holaaaa! Estoy emocionada por escribir esta historia, espero que le guste <3

Quería decir que pueden haber juegos que no describiré, ya que no lo considero importante, como el de Vida o Muerte y talvez cambie el hecho de que Tatta no muere, no estoy decidida, ¿qué opinan?