PINKY BOY©[MuSan]

✧༺PARTE OCHO🥀🍡༻✧

Narrador omnisciente

—Eso es, Sen —el pelirosa sonrió levemente al ver a la pequeña—, ven aquí conmigo. . .

Pidió el Akashi, le estaba enseñando a Senju a caminar, ya era hora que lo hiciera, aunque daba algunos pasos mientras que alguien la agarrara de la manito, Haruchiyo se decidió que ese día iba a ayudar a su hija a caminar.

—Hey, eso no se vale —le dijo cuando la pequeña se quedó sentada en el suelo de la sala al ver uno de sus juguetes—, mmh, bueno. . . Al menos lo intente.

Sonrió y se sentó en el sillón justo al lado de donde estaba la pelirosa jugando, miró la hora en el celular que Yasuhiro le había entregado en su primer día allí, aún faltaba para que el mayor volviera.

Dejó caer su cabeza hacia atrás para mirar el techo de la sala, no podía creer que había pasado tan rápido el primer mes, cree que apenas fue ayer que estaba huyendo y Muto lo había ayudado, sonrió ante ese recuerdo.

Si no hubiese aceptado la ayuda del mayor, vaya a saber uno en donde estaría ahora, y lo peor de todo, lo que hubiesen hecho con Senju, seguramente sólo sería una molestia para esos tipos y se hubiesen desecho de la criatura.

Aunque agradece que no le hicieran nada apenas se enteraron de su embarazo, había rogado, suplicado de rodillas mientras lloraba que no le hicieran nada, y por un momento. . . Esos hombres tuvieron compasión de él y dejaron que siguiera con su embarazo.

Aunque siempre le estaban recordando que hiciera caso a todo lo que le decían o podría irse despidiendo de ese apenas embrión. Allí fue donde Haruchiyo tuvo que ser más sumiso, todo sea para que no le hicieran daño al bebé que llevaba dentro suyo.

Pero a cambio, debía “trabajar” más horas y con otra cantidad de hombres, todo eso siguió los próximos meses de su embarazo hasta que no pudo soportar más, Takeomi hacia hasta lo imposible para conseguir dinero y le insistía al jefe que dejaran a Haruchiyo.

Con el vientre que se cargaba no podía hacer mucho esfuerzo y no podía hacer cosas que le ordenaban. Haruchiyo dió a luz a Senju a los ocho meses de embarazo, inmediatamente fue llevado al hospital por Takeomi y evitaron todas las incómodas preguntas del porque el pelirosa tenía semen y lubricante en su cuerpo.

Claro, ni siquiera pudo darse una ducha decente porque poco a poco líneas de sangre bajaban por sus piernas, llegaron a tiempo al hospital y Senju nació en las próximas horas. Los doctores les explicaron que aún faltaba más de un mes para que naciera, y que la tendrían en observación por un tiempo para asegurarse de que estaba bien.

Haruchiyo estuvo de acuerdo, todo sea para que la bebé estuviera bien, y el sangrado que tuvo el pelirosa se debió a que Senju había roto algunos vasos sanguíneos cada vez que había alguna contracción.

Pero lo importante era que ambos estaban bien, la pequeña paso en el área de observación del Hospital un mes entero y le había dado tiempo a los Akashi a preparar todo para la llegada de la bebé, pero claro, aún debían de seguir con lo suyo.