Nueva vecina

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PERSONAJES Y FOTOS NO SON DE MI PROPIEDAD, NI LOS ANIMES Y MANGAS PRESENTADOS AQUÍ, CRÉDITOS A SUS RESPECTIVOS CREADORES.








Pasando por la seguridad de la mansión, goku miraba la puerta de entrada cerca, pero el no sabía dónde ir, por suerte iba a ser guiado por una de las tantas sirvientas que hay, y gracias a unos de los guardias que fue a buscarla, algo bueno para el, no tendría que estar buscando por toda esta mansión y perderse un día allí.

Mirándo hacia ambos lados, espero parado allí como unos cinco minutos y el guardia acompañado por una chica llegó, la chica era blanca con su pelo azul oscuro casi negro y sus ojos iguales, llevaba el típico atuendo de sirvienta blanco con negro.

Llegando hacia donde estaba, el guardia le ordenó que le guiará a goku hacia la dueña y esta asintió amablemente.

—Hola señor-san, mi nombre es lunch, espero y nos llevemos bien —Haciendo una reverencia, la chica se presentó y goku hizo lo mismo.

—Hola lunch-san, mi nombre es goku y aún soy joven, espero y que si nos llevemos bien —dijo y se escuchó una risa de lunch que le hizo gracia lo que dijo goku, para luego volver a su sonrisa habitual.

—Por favor sigueme por aquí —hablo, caminando hacia una puerta de color marrón y goku le siguió por detrás, mirándo más el lugar con sus ojos plata.

Caminando por más de un minuto, goku estaba sorprendido, la casa era tan grande que todavía no habían llegado, además no se ha visto tanta personas.

—¿Será que hay pocas personas trabajando aquí o es tan grande que las personas están tan lejos? — Sé preguntó goku que miraba de lado a lado sin poder encontrar a alguien.

Siguió caminando atrás de la chica y que, por el momento no había dicho ni una sola palabra desde que entraron, ya sea por que no había nada de que hablar y plantar una conversación o por el simple hecho de que es un desconocido. ¿Quién sabe?

Goku miraba detenidamente cada rincón de esa mansión, si tomaba el trabajo, que todavía no sabía si tomaría, pero era bueno aprenderse por lo menos algo de esa casa lujosa.

—Y... ¿Goku verdad? —pregunta al chico que dejó de observar cuando escucho la voz de la chica.

—Si —afirmó y la chica volvió a mirar al frente, para prestar más atención, aunque tenía tiempo en esta mansión, aún era difícil aprenderse todo, así por así.

—¿Y qué trabajo vas a tomar? —preguntó y el chico la miro, sintiendo la mirada la chica se puso nerviosa. —Claro, si quieres puedes contarme, no es como si estuviera haciendo un interrogatorio.

Goku la miro para sonreír. —Eres divertida, no habías dicho nada y ya estás nerviosa —dijo y la chica solo suspiro para luego seguir caminando.

—Sólo tenías curiosidad —  hablo y goku asintió.

—Todavía no sé, voy a ver que tal y luego decidiré —dijo sin ánimo y la chica logró entender, para luego asentir.

—Ya veo, espero y te vaya bien —dijo y se detuvo en una puerta de color negro con una placa de oro o eso quería aparentar con un nombre escrito.

—Bien, fue un gusto entonces lunch —dijo goku sonriente y la chica le sonrió. —También fue el mío —hablo ella, para luego hacer una reverencia y girar para irse a su labor.

—Que chica tan divertida —pensó, para luego girarse y tocar la puerta oscura tres veces.

La puerta de pronto fue abierta y goku observó un poco lo de adentro antes de escuchar aquella voz. —Pasé, joven goku —La voz era fresca y tenía un toque de soltura, a goku le parecía algo exagerado, pero sabiendo la clase de persona negó aquello.

No pensé que terminaría asíDonde viven las historias. Descúbrelo ahora