𝐋𝐢𝐤𝐞 𝐑𝐞𝐚𝐥 𝐏𝐞𝐨𝐩𝐥𝐞 𝐃𝐨| Polin

VI

"𝐓𝐞 𝐬𝐮𝐩𝐥𝐢𝐜𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐭𝐨𝐦𝐞𝐬 𝐦𝐢 𝐦𝐚𝐧𝐨.
𝐀𝐫𝐫𝐮𝐢𝐧𝐚 𝐦𝐢𝐬 𝐩𝐥𝐚𝐧𝐞𝐬.
𝐄𝐬𝐞 𝐞𝐬 𝐦𝐢 𝐡𝐨𝐦𝐛𝐫𝐞."
-𝑾𝒊𝒍𝒍𝒐𝒘 (𝑻𝒂𝒚𝒍𝒐𝒓 𝑺𝒘𝒊𝒇𝒕)

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-Gracias por visitarnos -agradeció a Penelope a Francesca Bridgerton.

-Gracias a ti por recibirme -dijo Francesca.

La Bridgerton se despidió apropiadamente de Penelope y la condesa, luego se marchó junto a la doncella que había traído consigo.

-¡Milady! -Dorcas llegó corriendo casi al instante.

-¿Qué investigaste? -Penelope la miró expectante.

-Les recomiendo que se sienten, por favor.

Ivona y Penelope tomaron asiento en el sofá.

-¿Y bien?

-Hablando con la doncella pude sacarle información respecto al señor Bridgerton. Sí estuvo enamorado de alguien más, de una mujer a la que apodaron "la dama del vestido plateado", incluso la buscó durante meses para iniciar un cortejo formal pero ella nunca volvió a aparecer -dijo

-¿Ivona? -la llamó Penelope con preocupación al notar que esta le apretaba la mano.

Pero ella no respondió. Se mantuvo en silencio con la mirada fija en la nada durante varios segundos, después soltó la mano de su amiga y se levantó.

-Iré a comprar panecillos. Me ha entrado el antojo de algo dulce -dijo de la nada con voz serena.

-La acompaño milady -se apresuró a decir Dorcas.

-Voy con ustedes -dijo Penelope.

-No hace falta Pen -negó Ivona-. Debes quedarte en caso de que recibas visitas de Lord Petre o el señor Bridgerton -explicó.

-Concuerdo con su señoría -concedió Dorcas yendo detrás de la condesa quien no esperó a que Penelope le respondiera para irse.

-¡Cuídala! -gritó ella.

La curiosidad le ganó a Penelope y corrió hacia la puerta de la entrada, deteniéndose de forma casi abrupta al ver a su amiga la condesa en plena entrada hablando con el segundo Bridgerton.

-Estuve esperando por ti y nunca llegaste
-reclamó él. Parecía impaciente, casi desesperado.

-Disculpe, tengo prisa y me está obstruyendo el paso -mencionó ella intentando salir por el lado izquierdo sin ningún éxito puesto que Benedict le bloqueó el paso.

-¿Qué sucede? ¿Por qué me evitas? -cuestionó tratando de tomarla de las manos.

-Señor Bridgerton, por favor... -musitó con voz trémula apartando sus manos.

-¿Qué pasa? ¿Por qué me tratas de esa manera? -inquirió él tratando de mantener la compostura. Buscaba su mirada con desesperación, pero ella no le concedía el gusto de dejarle observarla a los ojos.

-Milady, tenemos que irnos -intervino una Dorcas bastante incómoda por la situación mirando hacia la calle, como corroborando que ningún curioso transitara por ahí.

-¿Podría dejar de obstruirme el paso? -cuestionó Ivona viéndolo a los ojos.

-No. Primero debes explicarme que hice mal -aseguró Benedict.

Penelope supo que a su amiga le estaba costando mucho mantener la compostura, desde donde estaba oculta podía verla con una mano casi adherida a la espalda, aferrando la tela de esa zona y ese era un gesto propio de ella cuando quería contenerse.