cap2

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Midoriya dejó de estar paralizado solo unos minutos después, y tuvo que obligarse a sí mismo a no mirar hacia donde Júpiter todavía estaba tendido, muerto. En cambio, sacó su teléfono y marcó el 110.

"110, ¿cuál es tu emergencia?" Preguntó el operador de llamadas.

"Stain." Midoriya graznó, con un nudo en la garganta por la emoción contenida.

"¿Lo lamento?" Preguntó la mujer, confundida.

"Stain." Midoriya dijo, más fuerte esta vez. "El la mató."

"Señor, ¿cuál es su nombre?"

"Midoriya". El chico tragó saliva y cerró los ojos con fuerza. no mires no mires "Midoriya Izuku".

"Midoriya-san, ¿dijiste que Stain mató a alguien?"

"Júpiter." Midoriya dijo. "El héroe que todo lo ve: Júpiter. El la mató." Y de repente, ya no pudo contener las lágrimas.

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La policía tardó menos de tres minutos en aparecer, menos de diez en bloquear todo el callejón y llenarlo de investigadores. El propio Midoriya estaba sentado en la parte trasera de una ambulancia mientras un paramédico atendía el corte en su brazo izquierdo, donde Stain le había extraído sangre para paralizarlo. Observó la escena, repleta de policías y héroes profesionales. Cada vez que veía a alguien con un atuendo brillante y distinguible, se preguntaba si Stain también lo eliminaría. ¿Eran falsos? ¿Sería Midoriya incapaz de salvarlos también?

"¿Midoriya-san?" Midoriya miró al oficial de policía, uno con una peculiaridad mutante que lo hacía parecer un gato. "Mi nombre es Oficial Tamakawa Sansa, trabajo con la división de homicidios de la policía de Musutafu. Necesito hacerte algunas preguntas, ¿está bien?"

Midoriya lo miró, casi catatónico. mutante Gato. ¿Le gustaba el pescado? ¿Qué pasa con el agua? ¿Cómo era su lengua? ¿Tenía garras? ¿Significaba eso que podía ser desgarrado? "Oficial Tamakawa, tal vez sea mejor esperar unos días. Casi no ha respondido desde que llamó". Sugirió el paramédico que lo atendía.

Tamakawa estaba a punto de asentir, listo para rendirse por el momento cuando de repente los ojos del chico se centraron en él. Realmente concentrado. "Stain estuvo aquí". Él dijo.

Tamakawa compartió una mirada con el paramédico. "Ya nos dijiste eso, Midoriya-san".

"Stain estuvo aquí". Midoriya dijo de nuevo. "Estaba atacando a Júpiter, dijo que ella era falsa". Tamakawa escribió algo en su libreta. "El la mató."

"Midoriya-san". Tamakawa extendió la mano suavemente, colocando una mano sobre la rodilla del chico. "No había nada que pudieras haber hecho".

Midoriya miró su rodilla, luego al hombre que lo tocaba. "Pero hice algo". Midoriya dijo, haciendo que los ojos del oficial se abrieran. "Hablamos. Stain dijo que era falsa, pero yo sabía que hacía cosas buenas por nosotros. Ella era una heroína". Midoriya siguió hablando y todos se detuvieron para escuchar. "Seguí hablando, y él me dejó. Hablé de todas las cosas que ha hecho, buenas y malas. Pensé que podría ganar tiempo, tal vez entonces ella podría escapar". Midoriya miró hacia el cielo. Júpiter hubiera amado el cielo esta noche. MIdoriya pudo ver un par de estrellas. "5 minutos."

Cuando no continuó por un tiempo después de eso, preguntó Tamakawa. "¿Qué fueron 5 minutos?"

Midoriya lo miró. "Su peculiaridad".

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Midoriya fue llevado a la comisaría y llamaron a su madre. Le presentaron a un par de oficiales más, ninguno de los cuales recordaría.

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