𝕀𝕃𝕃𝔼𝔾𝕀𝕋𝕀𝕄𝔸𝕋𝔼 || 𝕃𝕦𝕔𝕖𝕣𝕪𝕤 𝕍𝕖𝕝𝕒𝕣𝕪𝕠𝕟

III. COMMITMENT AND FRIENDSHIP?

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-¿Has visto a Luke, no lo veo desde la cena?-pregunto Rhaenyra.

-No pero de seguro esta en su cuarto, no te preocupes-dijo Daemon.

-Tienes razon ya es tarde y no creo que este despierto-sonrió.

-¿Qué te preocupa?-pregunto Daemon hacia su esposa, al no recivir respuesta supo a lo que se refería-¿Larissa cierto?

-Daemon-intento hablar la heredera al trono.

-No, no es culpa de mi hija que Lucerys este enamorado de ella, Lucerys se va a casar con Rhaena no te tienes que preocupar por Larissa, e estado pensando en comprometer la con Lord Cregan Stark, es dos o tres años mayor que Larissa pero creó que se entenderían a la perfección-dio Daemon.

-Eso es maravilloso, tendríamos a los Stark de nuestro lado si ese matrimonio llegará a ocurrir-sonrió la princesa Rhaenyra.

-Lo se-murmuró.

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Los ojos de la princesa Larissa repasaban con la mirada los vestidos que se encontraban frente a ella, siempre dijo que el azul era su color y tenía razón el azul le quedaba maravilloso.

- El azul-dijo mirando a la sirvienta que tenia a lado.

Una ves puesto su vestido, comenzó a arreglar su cabello, los golpes en la puerta se hicieron presentes, volteó a ver a la puerta indicándole con la mirada a la sirvienta que abriera la puerta.

-Princesa Larissa-entro en guardia de Aegon-el príncipe Aegon requiere su presencia en sus aposentos.

-Puedes retirarse-hablo mirando de nuevo a el espejo.

Su mente sólo podía pensar ¿qué quería Aegon?

Una ves lista salió de su cuarto en dirección, a los aposentos de su primo, apresuró su paso en cuanto noto que alguien más estaba en el pasillo.

-Princesa Larissa- sonrió el segundo hijo de la heredera al trono, deteniendo a la princesa.

-Príncipe Lucerys-dijo repitiendo su acción y caminar de nuevo.

-Tenemos que hablar-escucho decir a sus espaldas.

Pero ya estaba a una distancia considerada hizo como si no ubiera escuchado y siguió caminando, sus pasos fueron más lentos cuando estubo cerca del cuarto del principe, una ves que estubo enfrente miró al guardia que estaba custudiando la puerta, el guardia abrió la puerta revelando a El principe Aegon con una copa en su mano.

-Por fin llegas-sonrió acercándose a su prima- mi hermosa Larissa, te queda bien el azul pero el verde te quedaría mejor.

Río ante aquella propuesta del principe.

-Prefiero el azul antes que el verde, el verde me recuerda a las serpientes- dijo alejándose del peliblanco.

Las carcajadas del principe Aegon no se tardaron en oír.

-Por los dioses, no sabes cuanto te extrañe-murmuro.

-Bueno yo no puedo decir lo mismo, ¿qué hago acá Aegon?-dijo mirando la mirada perdida del chico.