5: Sparks

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29, Enero 2023

Los rayos del sol atravesaron por la gran ventana del cuarto alumbrando el rostro de Rodrigo. Su vista se aclaró viendo el de Iván frente al suyo. Estaba profundamente dormido y parecía un niño pequeño con las mejillas algo rojas junto y con un par de mechones callendo sobre su pálida frente.

No sabía cuánto rato se había quedado viéndolo y apreciando cada facción, pero si por el fuese haría eso el resto de sus días.

Carre solía molestar a Iván con lo atractivo que era, le gustaba ponerlo nervioso y la mayoría de veces, por no decir todas, funcionaba a su favor. Iván era eso que Carre aprecio desde el momento en que llegó a esa reunión de amigos, supo desde ahí que no se separaran nunca, eran almas gemelas y no de la forma romántica, para mala suerte de Rodrigo.

Pero siempre supo algo. Iván llegó en momento y lugar perfectos

Tomó su celular de la mesa de noche revisando la hora, las 7:50 de la mañana, nada mal para un día como este. Se quejo unas cuantas veces antes de ponerse de pie e ir a tomar una ducha antes de que Roier o Iván se despierten. Llevó la misma ropa de anoche al baño y solo cambió el buzo por otro de un solo color. No tardó demasiado en el baño, se volvió a vestir y antes de poder salir recordó lo que había sucedido anoche, el te quiero, hacia mucho que no escuchaba salir eso de sus labios, sin duda era lo mejor que había oído en días.

—¡Mierda! —escucho desde dentro de la pieza

Iván apago la alarma temiendo haberse quedado dormido más de lo que debía. Miró al lado contrario de la cama notando que estaba vacía, no sabía porque pero había comenzado a preocuparse. Quizás Carre tomó sus cosas temprano y se fue para no verle la cara en la mañana, ojalá y no.

—Iván ¿Todo bien? —Rodrigo apareció con el cepillo de dientes en la boca y el ceño fruncido

—Que bueno que seguís aquí, comencé a preocuparme creí que te habrías ido. —el castaño abrió los ojos mirándolo sorprendido por lo que acababa de decir

—No te preocupes. Igual creo que me cambiare de habitación e iré a la de Rob. —dijo aún con el cepillo en su boca

—Iras con Rob... —susurro en voz baja—Entonces creo que me quedaré solo, aquí, de nuevo. —algo dentro suyo estaba pidiendo que detuviera a Rodrigo, su presencia había sido lo mejor desde que llegó. Pero eso no sería tan hetero de su parte, rogárle a su mejor amigo se vería algo desesperado

—¿Te ducharas?

—Am... Si, dame un toque que busque mi ropa

—Esta bien. —dijo caminado de nuevo hacía el baño

Roier despertó por el ruido de las voces de los otros dos. Agitado se puso de pie buscando a Iván por todos lados, hasta llegar al closet

—¿Spreen qué hora es? —preguntó tomando por sorpresa al más alto quién buscaba sus cosas en en closet

—Son las 8 de la mañana. —Roier corrió tomando sus cosas lo más rápido que pudo

—¡Wey el Osvaldo debe seguir durmiendo! —se despidió con la mano y salió corriendo del cuarto

Iván solo soltó una risa tomando lo que se pondría para ir a desayunar fuera mientras caminaba cerca de la puerta del baño

—Ya desocupe el baño, podes entrar si querés

—Gracias. —le sonrió —Carre, anoche, cuando estabas durmiendo, yo.... —sintió un leve calor subiendo por sus mejillas evitando los nervios

—Lo olvidaré si es lo que quieres—dijo comenzando a jugar con sus manos—Pero no te preocupes, conozco como sos cuando estás borracho.

𝗧𝗲𝗹𝗹 𝗺𝗲 𝘄𝗵𝘆 - 𝘳𝘰𝘥𝘳𝘪𝘷𝘢𝘯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora