Error↓Reaper |3

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Error| ni siquiera termines la frase,
sé cómo termina. 3/3|Reaper

Las cuencas de Reaper reflejaron que dejaron el cansancio para dejar entrar al pánico, pronto, sus pupilas (que muy raramente aparecían) empezaron a temblar volviéndose unas pupilas tan delgadas, como un palo.

— ¿Cómo te llamé? —
Sus cejas se inclinaron, preocupación, culpabilidad, angustia...miedo.

— Geno. —
Apretó sus labios.
— me llamaste Geno. —
La sangre que debe de estar escondida en esos polvorientos huesos, se estaba yendo de su cuerpo. Sentía como la presión de su cuerpo y corazón empezaron a hacer reto por cuál le afectaba más a la muerte misma.

Se alejó, se alejó.

Se sentía mal estar al lado de Error después de hacer eso.
Sabía, sabía que debió de haberse quedado en su cuarto, descansando un poco.

No hubiera pasado esto.
No hubiera pasado esto.
¿No...hubiera pasado esto?

— Discúlpame. —
La tela que aún conservaba en sus manos, la empezó a doblar.

Aún no olvidaba.
No, Error, esas miradas no eran para ti.
No, rotundamente no, no iban dedicadas para ti.

Reaper ha estado siendo egoísta todo este tiempo, tratando de ver alguien vivo que el mismo mató, que el mismo condenó su corazón a marchitar.

Lastimosamente, son pequeños momentos de consuelo que a estado obteniendo por parte tuya, para alimentar lo que ha perdido.

— lo siento. —
Dejo la tela en su lugar.
— ¿Puedo sincerarme contigo? —
...

.
.
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— ¿Que has escuchado a alguien hablarte?, ¿de diferente nombre? —
Habló ink, mientras sostenía su pincel y lo miraba con la cabeza inclinaba hacía la derecha. En uno de sus ojos, se miró cómo había un signo de interrogación.

— ¿Tú sabes de eso, ink? —
Era la primera vez que hablaba con respeto ante ink, a lo cuál este, le pareció raro, pero sonrió.

— Creó que llego a recordar. —
Error lo miró incrédulo.
— ¿A poco? —
— ¡Lo digo en serio! —
Sonrió.

— ¿Puedes decírmelo entonces? —
El de vestimenta colores cafés, asintió.
Mientras dibujaba un poco.

— Todos estamos a nuestro derecho de saber nuestro pasado, porque es nuestro. —
Terminó de colorear.
— ¿Pero eres lo suficientemente fuerte para llevar una carga y una vida diferente a la cuál dejaste atrás, y arrepentimientos en el último suspiro? —
Lo miró, serio. Mostrando el dibujo.

— este eres tú, Geno. —

.
.
.
.

— Siempre pudiste hacerlo, Reaper. —
Lo miró, decepcionado.
— siempre. —
— ...Error. —

Ni siquiera termines la frase, sé cómo termina, Reaper. —

dulces amargos recuerdos y momentos.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora