𝙋𝙧𝙚𝙙𝙚𝙨𝙩𝙞𝙣𝙖𝙙𝙤𝙨 | Kaigyu

ᴄᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 04

Kai se encontraba haciendo su tarea de la
universidad a lo que siente la puerta abrirse, era su hermano, Soobin.

—Necesito que me pases las llaves del auto, iré a la casa de un amigo a ver una pelicula.

—¿Qué? Claro que no, no tienes licencia de conducir, y aunque tuvieras no te prestaría el auto.

—Kai, por favor, no quiero llegar tarde, ya voy tarde.

—No es mi culpa, así que toma el autobus o solo ve caminando.

—Por favor, o ve a dejarme tu, no es necesario que vayas por mi luego.

—No, estoy haciendo, mi tarea, ¿acaso no lo ves? Asi que dejame solo. — Kai ya se estaba comenzando a molestar.

—Por favor, hermanito. — Soobin seguía insistiendo.

Kai suspiro pesadamente y asintió con la cabeza a lo cu sonrió y lo abrazó con algo fuerza.

—Si me sigues abrazando cambiaré de opinión.

Soobin lo soltó de inmediato y se fue a su habitación a arreglar. Kai se dirigió a la sala sentandose en el sofá a esperar a su hermano. Luego de algún rato este bajó.

—Vamos, no quiero llegar tan tarde.

Kai se levantó del sofá y tomó las llaves del auto saliendo del la casa, se subió al auto esperando a que su hermano se subiera, pocos minutos después Soobin subió al auto, a lo cual Kai prendió el motor y comenzó a manejar hacía la dirección que su hermano le había dado.

Algunos minutos después llegaron a la dirección, bajaron del auto y fueron a la entrada tocando. No sabía porqué fue junto a su hermano, su lobo lo pedía, pedía ir junto a su hermano.

—Sabes que no es necesario que vayas conmigo.

—Sí, lo sé.

Se comenzó a sentir algo extraño, su corazón latía con rapidez no entendía porqué, y unos pocos minutos después abrieron la puerta, era un chico bastante lindo, Kai se quedó hipnotizado mirandolo, pero su hermano lo sacó de sus pensamientos.

—Oh, no lo conoces, es Kai, mi querido hermano, pero no importa así que vamos.

Soobin entró a la casa dejando a ambos chicos, Kai estaba nervioso, no sabía que decir o que hacer, su corazón latía con fuerza y su lobo pedía estar junto a ese omega, pero no hizo caso a su lobo, nunca antes lo había visto.

—Eh... es mejor que me vaya. — Dice Kai algo
incomodo.

A lo que el omega solo asiente con la cabeza, Kai se da la vuelta y comienza a caminar sintiendo como se cierra la puerta de la casa, eso si que fue incómodo pensó el alfa.

Por otra parte se le hizo extraño que su lobo apareciera, ya que hace algunos años que no se había hecho presente.

Subió a su auto y comenzó a manejar hacía su casa. Al llegar a su hogar se dirigió a su habitación y continuó haciendo sus tareas.

Pocas horas más tarde se levantó de aquella silla tan incómoda, ya que estaba cansado de hacer sus tareas. Su hermano aún no regresaba a casa así que aún no iba a cenar. Entonces se dirigió al baño para darse una ducha.

Se quitó la camiseta y sintió un leve dolor en la espalda, al cuál no le tomó importancia, luego sintió como si pinchaban su espalda y se miró la espalda por el espejo.

Vió un tatuaje, era una flor, pero el no se había hecho ningún tatuaje lo que se le hizo muy extraño. Pensó que estaba imaginando aquello así que se quitó la ropa que aún tenía puesta y se duchó.

Al terminar secó su cuerpo y volvió a mirar su espalda que aún tenía el tatuaje. Kai se vistió rápidamente y tomó su celular buscando información sobre aquel tatuaje que adornaba toda su espalda, el porqué salió de la nada, o por lo menos que no había visto salir.

. . .

Hanahaki 😔