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Me levante en una cama ajena. En un cuarto ajeno. Podía observar y el cuarto estaba con cuadros o camisetas del barca.

Me había ido con pedri seguramente. Me levante y tenia puesta una sudadera larga azul. Busque las escaleras para bajar.

-Sere! Te has despertado.- dijo alguien quien no parecía ser Pedri.

-Hola? quien eres?- pregunté bastante confundida mirándolo.

-Ah, soy Fer. El hermano de Pedri.-

-Con razón. Si sois iguales!- dije y fer río.

-Lo siento, te tome por sorpresa pero Pedri me había comentado que estarías aquí.-

-Pedri está aquí?-

-Si, aún sigue durmiendo. Son las once de la mañana, podrías despertarlo mientras termino el desayuno?-

-Claro!-

Dije y me dirigí en busca del cuarto de Pedri. La casa era bastante amplia, tenía un par de cuartos. Luego de estar de puerta en puerta lo encontré.

Se veía tan lindo y serio cuando dormía, me daba pena despertarlo. Subí a la cama y me senté a su lado mientras lo movía para despertarlo.

-Pedri?-

-Que pasa.- dijo con ojos aún cerrados.

-Que tu hermano me ha dicho que te despierte!-

-Uy, este Fer.- dijo él abriendo los ojos. -Sere!- dijo sorprendido.

-Asi es.- dije riendo.

-Me había olvidado, tenia que ser yo el que te despierte, lo siento.- dijo decepcionado.

-Pero no pasa nada, tu levántate que yo y Fer te esperamos.- dije y asintió.

Baje las escaleras para ayudar a Fer. Puse la mesa y prepare jugo. Mantuve conversación con Fer sobre la fiesta de ayer y hablamos de la comida y la cocina.

-Que sorpresa!- dijo Fer.

-Ya!- dijo Pedri.

Rei mientras que los hermanos bromeaban.

-Con Sere te hemos preparado un banquete!- dijo Fer.

-Sip, tenemos jugos, sándwich y unas tostadas deliciosas!- dije.

-Madre mia! Que buenos cocineros.- nos halagó Pedri.

Desayunamos juntos mientras Pedri nos contaba que ayer yo estaba completamente ebria y reímos bastante.

Fer y Pedri me invitaron a pasar la tarde con ellos y acepté ya que me lo pasé bastante bien. Desayunamos, almorzamos y para la merienda queríamos cocinar una torta.

Pusimos manos a la obra mientras escuchábamos Quevedo y empezamos con la torta para mirar la serie.

-Pepi, la harina!- dijo Fer.

-Voy!- respondió Pedri.

-Pepi?- pregunté riendo.

-Asi es, así le digo a Pedri desde que es un bebé.- dijo Fer burlándose conmigo.

-Pues gracias Fer, ya tengo apodo!- dije mientras chocábamos los cinco.

-Serena!- dijo Pedri regañándome.

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cardigan | pedri gonzálezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora