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Apenas Felix entró a su cuarto vio algo espeluznante que hizo que se arrepienta haber rechazado la invitación de Changbin.

Todo su cuarto estaba lleno de ratas y pintura roja simulando ser sangre, al ver esto a Felix se le erizó la piel y lo único que deseaba era que fuese una alucinación producto de su cansancio, pero para su mala suerte, no fue así.

-- Oh dios... -- dijo en voz baja cuando notó una pequeña nota dentro de una caja en su mesita de luz, dudó mucho pero al final decidió leerla, él no tenía miedo, era el maravilloso Lee Felix, nadie podía hacerle nada, no?...

"Hola queridísimo Felix, te recuerdo que no sos la persona más querida de este puto mundo, no te creas la gran cosa, tarde o temprano vas a caer y voy a poder hacer lo que siempre quise y nadie va a salvarte, ni con todo el dinero del mundo van a poder tenerte otra vez, te recomendaría que te cuides un poco más o sino tu final va a estar más cerca de lo que creés, lo que más deseo es que pronto todos estén llorandole a tu tumba, destrozados porque a su "maravilloso" Felix lo mataron, no tenés idea de lo que me gustaría estar como infiltrado en tu funeral viendo como todos lamentan tu muerte sabiendo que el culpable acá soy yo, espero que en un futuro no muy lejano pueda cumplir todos esos deseos.

Con amor (no) xxx"

Felix al leer eso se quedó helado, no sabía que hacer, ni en que confiar, no tenía idea de lo que podría llegar a pasarle o si alguien siquiera podría ayudarlo, dudó mucho en decírselo a sus padres ya que ellos son muy sobreprotectores pero no había otra opción, tarde o temprano debería ponerle un límite a ese extraño acosador.

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Unas horas más tarde llegaron los padres de Felix, se sentaron a cenar y él no buscó otra oportunidad, no quería aceptarlo pero estaba aterrado, seguro esa noche no iba a pegar un ojo del miedo, pero es entendible, o sea hay un puto acosador que le manda cartas con amenazas de muerte y deseos sobre lo que quiere hacer con él y para el colmo entra a su habitación y la hace un desastre, cualquiera que esté en el lugar de Felix estaría aterrado.

-- Padres... -- dijo Felix un poco inseguro sobre lo que iba a decir.

-- Si amor? -- dijo su padre Jungkook con una cara de confusión al ver la mueca confusa que tenía Felix.

-- Mmm, realmente no se si es un simple chiste o va enserio pero -- Felix paró para poder pensar si lo que hacía era correcto o no tendría que decir nada, total tenía tiempo para volver atrás y decir que no era nada, pero no se lo quería guardar.
-- Estos días recibí unas cartas un poco extrañas sobre un supuesto acosador que quiere hacer cosas horribles conmigo, pintó mi habitación y la llenó con ratas, también me sentí un poco observado estos días pero eso puede ser solo mi mente jugandome un mal chiste -- soltó sin más.

Tae y Kook no podían creer lo que decía su hijo, era completamente extraño que le esté pasando eso, ¿Quién se atrevía a meterse con su hermoso hijo? No lo sabían, lo único que sabían era que ese hijo de puta iba a pagar por causarle miedo a su bebé ya no tan bebé.

-- Felix... -- fue lo único que pudo soltar su padre Kook ya que estaba en shock, y Tae casi se desmaya del susto. No eran exagerados, solo les aterraba la idea de que un acosador siga a su hijo y lo amenace.

Unos minutos después pudieron calmarse y pensarlo bien, con solo una mirada ellos ya sabían lo que iban a hacer, Felix se había negado varias veces porque decía que ya estaba grande, pero no quedaba otra, era eso o arriesgarse a perder a su hijito.

-- Felix -- habló Tae después de tanto tiempo.
-- Ya es hora hijo, no podemos seguir esperando y someterte a tantos peligros... -- dijo con una mueca que Felix no pudo descifrar, pero no tuvo que pensar mucho para saber a lo que se referían.

-- NO! -- gritó levantándose de la mesa y golpeándola con sus manos haciendo temblar los platos y vasos que estaban sobre esta.
-- NO QUIERO, ME NIEGO -- gritó como si fuera la peor idea del mundo.

-- Pero cariño, es por tu seguridad -- ahora el que habló fue Kook, no podían seguir así, debían proteger a su Felix.

-- Pero padres, no quiero un guardaespaldas, no quiero un viejo canoso como chan siguiéndome a todas partes, no quiero, quiero privacidad, quiero poder caminar sin necesidad de que me sigan 9 viejos cuidandome la espalda -- dijo Felix lo más rápido que pudo para así poder hablar antes que sus padres.

-- No Felix, suficiente, nos preocupamos por ti, no te dejaremos andar solo cuando tienes un PUTO ACOSADOR -- Kook hizo énfasis en esas dos palabras
-- No te dejaremos solo, y un no es no. -- dijo Kook para finalmente retirarse de la mesa, Tae le dedicó una mirada que Felix tomó como un "perdóname, pero es por tu bien" y seguido de esto se retiró de la mesa.

-- No... No, NO NO NO -- se repetía Felix en su cabeza, para algunos será tonto, hasta un poco exagerado pero para el era lo peor que le podía pasar, no quería a nadie que le cuide las 24 horas, quería privacidad, le daba asco imaginarse a el caminando con un viejo atrás, no quería eso pero no podía hacer nada más.

Estuvo un rato más pensando, casi ni había tocado su plato de comida pero como sus padres, agradeció a las sirvientas por la cena y se retiró a si otra habitación, ya que la principal estaba llena de pintura que tardarían un poco en tapar.

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HOLAA, estoy againn, perdón por no actualizar, estuve en unas vacaciones con mis primas y siendo sincera no estuve con el celular, agradezco a la gente que leyó mi fic, recuerden que es la 1ra vez que escribo una y no estoy muy acostumbrada, no va a ser la mejor pero hago lo que puedo, voy a intentar actualizar más seguido, chauu!! si pueden votar se los agradecería muchísimo 💓💓

Por ti renuncio a todo...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora