Bajo la luz de la luna

1.El encuentro

Ahí me encontraba yo.....
Corriendo a toda velocidad por los pasillos de la facultad, buscando donde llevaría mi primera clase.

¡Genial!

Mi primer día en la universidad y llegaría tarde

Soy nueva en la ciudad, por lo que me perdí de camino hacía aquí, una de las razones por las que iba tarde.

Nos mudamos hace un par de días.

La razón?....

La razón tenia nombre y apellido
Liam Collins.... Mi hermano mayor.

El nos contaba su sueño de vivir en Los Ángeles, siempre mencionaba lo bueno que sería vivir ahí, hablando de las grandes oportunidades de trabajo, las universidades, la hermosa playa pero sobre todo la variedad de personas que habitaban ahí.

No había nadie que lo detuviera. Trabajaba doble turno. Comenzó a investigar más sobre la cuidad, buscaba departamentos, trabajos y una universidad, nunca se dio por vencido.

Lo había encontrado todo, su universidad ideal, trabajo y un gran departamento, todo iba acorde a su plan, Pero cuando estaba a un paso de lograrlo, su vida dio un giro inesperado, su corazón no pudo más y se detuvo para siempre al igual que sus sueños.

Fue un impacto muy fuerte para mi madre y para mi...

Al principio fue difícil recuperarnos de esa pérdida tan grande.

Días donde era difícil intercambiar palabras entre mi madre y yo. Días sin salir de casa.

Así fue por unos meses hasta que mi madre decidió ponerle fin al duelo. Rindiendo honor a la memoria a mi hermano....
Cumpliendo su sueño que dejo pendiente al partir. Vivir donde siempre deseó.

Los Ángeles California.

Fue la mejor idea que pudo tener mi madre y un detalle muy bonita para rendir tributo a mi hermano.

Después de ahí nuestras vidas cambiarían por completo.

En cuestión de poco tiempo, todo estaba listo, dejaríamos el pasado atrás para empezar desde cero, nueva ciudad, nueva vida, nueva casa y nuevas personas.

No nos tomo mucho tiempo en empacar todo y mudarnos.

No me arrepentía haberlo dejado todo atrás, pues digamos que no era muy sociable por ser la "rarita de los libros" o al menos así es como me llamaban mis compañeros, así que el único amigo que tenía era mi hermano pero ya lo había perdido para siempre.

Solo quedábamos mi madre y yo, así que a donde ella vaya , la seguiré hasta el fin del mundo.

A pesar de tener pocos días aquí me encanta la ciudad.

Todo es hermoso aquí.

En fin.

Esa fue una de las razones por la que iba tarde, han sido días muy cansados por la mudanza que olvide programar el despertador.

La única opción que tenía era caminar dando pasos muy rápidos, y con el café en una mano y en la otra la lista de mis horarios era muy difícil.

¿Que es lo peor que podía pasarme?