Death Note; Lawlight OS

02| Inseguridades

Light nunca tenía inseguridades, era muy raro en él llegar a pensar eso desde que empezó a salir con Elle, pero desde que su pareja encontró a un sospechoso en su caso, la paranoia le agarro.

Pero tenía razones, él había conocido a Lawliet siendo sospechoso, se enamoraron y se hicieron pareja.

¿Qué le decía que ahora no podía pasar lo mismo?

Confiaba al 100% en Lawliet, solo que no confiaba en él mismo.

Vió al chico una vez, era lindo, alto, de piel perfecta, cabello rubio plateado, ojos miel, cuerpo de modelo e inteligente.

Light no dudaba que tenía buen aspecto físico y era muy inteligente, ¿pero y si en realidad aquel chico era mucho más lindo que él? ¿Y si tenía conversaciones más animadas con L?

Desde que Ryuzaki llevo al sospechoso al departamento de investigación no hablaba mucho con Light, o si hablaban era como si el pelinegro estuviera aburrido de él.

¿Lo estaba?

¿Ya no era la maravilla de Elle?

Tenía miedo, mucho miedo, a las noches lloraba mientras esperaba que su novio volviera, lo que nunca hacía.

No volveré a dormir a casa, perdón.

¿Perdón? ¿Por qué escribía perdón? Lawliet sabía que Light siempre entendería si le decía q no podía ir a dormir por los casos.

¿Le pedía perdón porque lo estaba engañando?

Light se empezó a sentir peor, hasta que se empezó a enfermar.

No quería llamar a Elle, no quería preocuparlo.

-¿Ahora que, Light? Estoy ocupado, no puedo hablarte.

Eso le había dicho el pelinegro cuando lo llamo porque necesitaba que le dijera 'te amo', necesitaba volver a esos días donde L le abrazaba y le repetía cuanto lo quería.

¿Qué estaba haciendo mal?

Light sentía que era culpa de aquel muchacho, o solo quería tener a quien culpar para no aceptar que él era el idiota.

Decidió marcar a Lawliet, realmente necesitaba hablar con él.

-¿Light? ¿Qué pasa? Ya te dije que no me llames, mira si rastrean tu llamada y te pasa algo-habló Lawliet una vez contesto.

El castaño no pudo contenerse y soltó un fuerte sollozo.

La línea quedó en silencio.

-¿Qué pasó, amor?-pregunto en todo preocupado el detective.

-Te necesito aquí, conmigo...

La llamada se cortó y después de una hora el azabache entro a la casa y fue en dirección a su pareja, abrazándolo de manera protectora.

Light lloraba a mares, se sentía desfallecer de tantas lágrimas.

-¿Me quieres contar que sucedió?-respondio con cautela el detective.

-¿M-me dejarías por el chico del que sospechas?

La cara de L se formó en una mueca extraña, como si le hubieran contado algo estúpido.

-¿Cómo dices? Pareciera como si no me conocieras, Light. Eres a la única persona que ame, amo y amare en toda mi vida. Eres la luz de mis ojos, el dulce único entre tantos, uno que tengo suerte de probar. Nunca pienses que te dejaría por un bobito, yo te amo a tí y nadie más podría entrar a mi corazón-dijo con voz tranquila el azabache, acercando más al castaño hacia él.

Light poco a poco dejo de llorar, lazandose a los labios de su pareja.

-Tuve miedo de que lo eligieras a él por ser más bonito.

L lo miro con una ceja alzada.

-Nunca ví a alguien que te superará en belleza e inteligencia.

Los dos se acostaron en el sillón, Light encima de L, mientras que este le daba mimos en la cabeza.

Fue una larga noche de abrazos, mimos, y palabras de cariño, recordandose lo mucho que se amaban.