El Temerario

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Base Autobot, Nevada

Desde que el comandante Ultra Magnus fue hayado, se lo orientó para adaptarse al ámbiente planetario, debido al tiempo en congelación sus sistemas jactaron al igual que su cuerpo, aún así, el tiempo paralizado lo hizo reflexionar consigo mismo sobre su actitud, estabilidad emocional, sufriendo y empeorando, al enterarse de quien lo encontró y salvó fue peor, siendo este el huérfano qué dejo atrás.

Escazes de energon empezó para ambos bandos, los autobots solo lograban tener pocas cantidades de este elemento, entonces se decidió que para localizar otras minas que estén ocultas para extraer este componente vital, se decidió enviar a dos jóvenes, pero experimentados exploradores.

Uno de ellos era un auto deportivo amarillo con franjas en negro con problemas de vocalizador llamado Bumblebee, y el otro joven también un vehículo deportivo pero a diferencia que este era blanco con rayas azules, el era Smokescream, el mismo huérfano qué el comandante crió

Estos dos jóvenes autobots eran enviados a las misiones de localización de energon, qué en su mayoría, estos eran ordenados por Ultra Magnus. En la mayoría de misiones enviaba a Smokescreen, siendo el verdadero motivo de todas estas, saber que tanto aprendió junto a Alpha Trion y enmendar el error de haberlo abandonado cuando prometió nunca dejarlo; esa era la cruz con la lidiaba día a día, sin poderse perdonar ese acto de renunciar a Smokescreen cuando más nesecitó, haberle dado la espalda cuando su código de honor era totalmente lo contrario, se sentía traicionado a si mismo.

Desde el punto de vista de Smokescreen aun poseía cierto rencor por el comandante y su partida, pero en su estancia con Alpha Trion le hizo ver que tenía habilidades morales que no desarrolló junto a Magnus, aun así aparte quería disculparse por sus acciones, dar el primer paso.

Eones atrás

Estancia de Alpha Trion

-Magnus fue demasiado severo con él- declaraba el archivista Orion Pax a su maestro
-A mi parecer es lo mejor para ambos-espondió el viejo bot
-Pero aun así abandonarlo de esa manera, eso va incluso fuera de la forma de pensar de Ultra Magnus-
-Iré a hable con Smokescreen- dijo Tríon dejando solo a Orion

Al otro lado de ese viejo y oxidado lugar, se encontraba Smokescreen, un sentimiento de vacío y traición apoderandose de él, golpeaba con intenso coraje las paredes, estando al borde del llanto hasta que alguien lo sometió y agarró sus brazos detendiendolo como una camisa de fuerza.

-Tranquilizate, no conseguirás qué regrese de esa manera- declaró Alpha Tríon sosteniendo fuertemente al menor

-Suelteme, no le incumbe qué yo este aca- respondió desesperadamente, riñendo para soltarse del agarre apresador

-Claro que me incumbe, de ahora en adelante tu estas en mi cargo- contradijo soltando al joven haciendo que descendiera en el frío suelo.
Smokescreen se contrajo poniendo las manos sobre el suelo, esas palabras lo noquearon

-Escucha, es difícil para ti pero debes saber que esto es por un bien, Magnus debe controlar un pelotón y tu todavía -

-Todavía soy un niño insoportable verdad, acaso no merezco un poco de tiempo también? Solo déjeme en paz, no quiero saber nada ahora-

-Smokescreen, debes aprender a madurar, si quieres salir y liberarte de tus conflictos, debes salir adelante solo y sobre todo saber como perdonar- refutó hasta alejarse de él.

El sabio maestro dejo solo al pupilo aun niño, debe sanarse a si mismo y aprender qué no todo dura para siempre.

Presente

El Comandante y La Bestia (Transformers)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora