Recuerdos borrosos
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.Pov Katsuki
Esa misma noche
Me encontraba asegurando la reserva de un hermoso restaurante en un barco, uno de los pocos lugares a los que no fuimos con Mei hasta el momento, así que quise sorprenderla.
Nos arreglamos en habitaciones separadas para que sea una sorpresa ver como estábamos vestidos, pero debo admitir que estaba algo ansioso por verla.
Pasaron aproximadamente cinco minutos después de que terminara de arreglarme cuando alguien tocó el timbre del departamento y escuché a Mei atenderlo.
Cinco pasos pasos y cuatro golpes en mi puerta, era Mei diciendo "Tu hermano está aquí"
Voy a matarlo.
- ¿Podrías decirle que venga al la habitación amor? No quiero verte hasta estar listo.
- Ya escuchaste, pasa -habló Mei a mi hermano-
Zack entró a la habitación desesperado, como siempre que necesitaba pedir algo muy poco importante, ya sea dinero o un pasaje de avión a Atlanta para verse con alguna desconocida de tinder.
- ¡Katsuki! -me gritó de la nada- voy a una cita esta noche y olvidé toda mi ropa en Londres, soy un tarado.
- ¿Recién lo notas? Eso te hace todavía más tarado. -Respondí acomodando mi corbata- toma algún traje de mi armario pero no los de la izquierda porque estás pendejo y los vas a arruinar.
- No hermano, no necesito un traje, es una cita en... la playa.
Esa pequeña pausa me hizo dudar de sus palabras. ¿Iba a una cita realmente?
- ¿Cómo se llama la chica?
- Emm.. Emma, si -volvió a tardar-
- ¿En qué zona de la playa?
- En la cervecería que está en frente -Respondió rápido-
Dude un poco pero la verdad era que no me importaba. Yo tenía que salir con mi esposa y quería que el tarado se vaya rápido de mi casa.
-Toma lo que quieras, cámbiate y largo. -Le ordené sin vueltas-
- ¿Me das tu perfume? Me gusta el olor a menta que tienes -Dijo sonando... gay-
- Oye cálmate norteño, tómalo y largo.
Zack se cambió en tiempo récord y salió de casa robandome la caja de cigarrillos que estaba en mi mesa de noche, lo cual dejé pasar porque quería irme pronto.
Salí seguido de Mei hasta el living y la vi. Estaba preciosa con su vestido rojo lleno de brillos y los tacones que le regalé en su cumpleaños.
Una mujer así seria un sueño para cualquiera, pero pese a todo eso ya estaba notando que cuando la miraba, esa chispa en mi corazón había dejado de existir.- Estás divina -le halagué besando su mano-
- Tú me opacas -respondió sonriendo-
Nos subimos al auto rumbo al barco mientras escuchábamos The Weekend, pero el silencio incómodo por momentos era algo inevitable.
- ¿Puedes bajar en la estación de servicio? Quiero unos cigarrillos y luego ir al baño -pidió la pelirosa-
- Claro, déjame estacionar.
Aparqué el auto al lado de la estación y Mei bajó tan rápido que olvidó su celular... El cual no dejaba de vibrar, como si estuvieran llamándola.
¿Qué tan mal estaría mirar quién es? Es mi esposa y quizás sea una emergencia... A demás se que no usa patrón porque es muy olvidadiza.
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Disaster
Teen FictionÁmbar es una joven inmigrante que cruzó la frontera de México hasta los Estados Unidos en busca de una vida mejor. Katsuki Bakugou, reconocido empresario de una constructora multinacional y con un matrimonio disfuncional, conoce a la única joven cap...