Luzimber Saturno Escuela de Magia

El primer día

Eran las 8 de la mañana y todos los alumnos ya se dirigían a sus clases. Fei iba a la clase del profesor Julio, daba hechizos. Carl se dirigía con la profesora Smouth a la clase de pociones, mientras que Katy tenía clase de vuelo.

-Bien chicos, soy el profesor Julio, yo os enseñaré hechizos. Ahora, coged todos, una pluma, un papel y la varita. Hoy os enseñaré a hacer el mismo hechizo en papel y con varita. Alguna pregunta por ahora. Dime.

- ¿Para qué nos sirve saber hacer uno en papel y con la varita si es el mismo?

- Tú piensa, si un día no tienes tinta, pero sí varita, necesitas saberlo hacer con la varita y si te pasa al revés lo mismo. No hay más preguntas, ¿no? Vale.

Hoy aprenderéis a hacer el conjuro de luz, se llama lumis. Esta es la forma que tenéis que dibujar.

Y en la pizarra dibujo el signo del hechizo. Todos los alumnos lo copiaron y lo dejaron a un lado.

-La única manera de saber si lo habéis hecho bien es probarlo, ¡adelante!

Por toda la clase se oían las palabras: "Lumis funcion" y cuando terminaban de decirlo un toque de varita o dedo. A muchos de ellos les salió bien.

Justó tocó el timbre que decía que la clase acababa. Todos guardaron las cosas y salieron del aula esperando a sus amigos, menos Fei, que salió corriendo a por Katy para enseñarle su "gran" logro.

- ¡Mira Kate! ¡Ya se hacer un hechizo!

- Muy bien Fei-Dijo orgullosa- ¿Vamos a enseñarle tu hechizo a Carl quieres?

-Sí.

A la vez que Fei estaba en clase Carl se esforzaba por hacer su primera poción.

-Muy bien chicos, hoy os enseñaré a hacer la poción del olvido. Primero ponemos a hervir el agua. Cuando empieza a hervir le añadimos patas de sapo y pelo de troll. Removemos. Si está roja es que vamos bien. Luego le ponemos pie de lombriz y ojo de murciélago. Hecho eso debería de quedarnos con un color verde intenso. La sacamos del fuego y la dejamos enfriar. Venga pensad en algo que no queráis recordar y tomáosla.

Como a ninguno excepto a Carl le salió la poción nadie la probó, pero a él sí que le funcionó.

- Carl, ¿recuerdas en lo que estabas pensando?

- La verdad es que no.

- Perfecto, entonces ayuda a tus compañeros.

El chico asintió y se fue con una niña que se llamaba Marta. Empezaron de cero y le indicó, qué, cuando y como tenía que hacer las cosas.

A quien ayudó le salió bien.

- Bien, como veo que ya lo tenéis todos, lo vais a repetir sin ayuda para aprender a hacerlo solos.

Todos protestaron, pero la profesora no mostró compasión.

- Dime Carl.

- ¿Cuánto dura esta poción?

- ¿El uso o la conserva?

- Las dos.

- El uso dura hasta que o lo vuelves a ver o te lo recuerdan, y la conservación, pues si lo tienes bien tapado puede llegar a durar mucho tiempo.

- Vale gracias.

Rápidamente repitió la poción y el resultado lo metió en un frasco para enseñárselo a su hermana y a Fei. Justo sonó el timbre.

- Mirad chicas, es una poción del olvido.

- Lo mío es un hechizo de luz.