INTRODUCCIÓN

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Un pueblo a las afueras de la gran ciudad de Seúl.

Dos familias en guerra, los Jeon y los Park. Pocos recuerdan el por qué del pleito pero si un Jeon compraba un terreno.. Park compraba uno más grande. O si un Park abría un negocio de muebles un Jeon abría dos más.

El dinero que generaban a la comunidad les convenía, así que las autoridades se hacían de la vista gorda.

Los Park enseñaban a sus hijos a odiar a los Jeon desde que nacían. Y los Jeon habían exactamente lo mismo.

Nunca había pasado nada grave entre ellos además de pleitos que llegaron a ser demasiado violentos, peleas en las escuelas y algunos insultos en los centros comerciales.

Así que el pueblo era feliz, cuando había pleitos con grandes destrozos los Park pagaban si ellos habían iniciado, pero además una cuantiosa multa salía de sus bolsillos.

Y como los Jeon no eran alguien que se dejaran humillar por nadie, pagaban también los destrozos y la multa estipulada por la autoridad.

Y todos tan felices como siempre...

La familia Jeon educó al joven heredero de cuanto poseían, a ser déspota, mal educado a obtener lo que quisiera cuando quisiera a como diera lugar. Debía ser un macho en todo sentido de la palabra. Su padre le aconsejo tomar las mujeres que quisiera, usarlas a su antojo y si alguna se resistía obligarla a como diera lugar.

Al morir el padre, el último además del joven Jungkook, dejó a cargo de su hijo, muy inteligente ese muchacho logró duplicar la fortuna de su familia, y al ser el único hijo se ahogaba en dinero, pero también en soledad y odio a los Park.

Los Park tenían dos hijas, y en ese año en particular una triste carta llegó al señor Park. La hermana que treinta años atraz había huido del pueblo falleció. Ella logró hacer fortuna explotando lo que más conocía la belleza y el glamour.

Una muy famosa agencia de modelos, con eventos internacionales estaba entre sus activos.

Un abogado, que fue quien aviso el fallecimiento de la dama. Le hizo la invitación a la lectura del testamento.

Y lo más importante, a qué conociera a su sobrino....

-Mujer un hombre, ¿te das cuenta? Al fin alguien que ponga  en su lugar al arrogante y pedante Jeon.

-Aja - ella se limitó a decir.

Aquí empieza la historia, un Park contra un Jeon. O será un Park con un Jeon...

El pueblo entero teme que uno de los dos muera al final.....

El odio no se puede ocultar...

¿El amor si se puede ocultar?

¿Qué pasará al ensender la luz?

El odio no se puede ocultar, pero se puede exterminar, el amor se puede ocultar pero no por mucho tiempo, cuando la luz es para todos, la guerra puede terminar o dos enemigos nuevos recién empezarán la luchar.

Vamos a ver esta historia, tal vez, digo solo tal vez entre los peores enemigos, podamos encontrar los ms fervientes amantes........

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