Jung Hoseok vive en un departamento con sus 4 mejores amigos que son pareja entre ellos, es el amigo soltero, pero comienzas los problemas económicos que hace que dejen entrar nuevos inquilinos.
-¿Qué pasara cuando empiece a sentir atracción por su...
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*HOSEOK*
Pasaron tres días desde aquel desagradable encuentro con el padre de Yoongi, porque lo que lo he notada más callado, más pensativo, ese día no quise averiguar más de la cuenta, estoy esperando que él pueda confiar en mí, sin presiones, no quiero obligarlo a recordar momentos que evidentemente no son agradables para él.
Por lo que hoy decidí prepararle una sorpresa, siendo viernes, mañana no tendremos clases y por eso sé quién es la persona perfecta para eso.
Mire mi reloj aún faltaba una hora para que la alarma de Yoongi suene, me levanté sigilosamente tratando de no hacer ni el más mínimo ruido, aunque a veces no es necesario ya que Yoongi tiene el sueño bastante pesado, podría pasar un camión por encima de el y no se daría ni cuenta.
Al momento que cerré la puerta de mi habitación bajé corriendo la escalera, y hay estaba mi salvación como siempre preparando el desayuno, definitivamente no seriamos nada sin Kim Seokjin.
—¡Jin! ¡Jin! —el nombrado dio un pequeño brinco por la sorpresa, llegué a su lado y comencé a jalar su brazo dando pequeños saltitos —Necesito de tu ayuda.
—Primero que todo cálmate, terminarás por sacarme el brazo —solté su brazo y sonreí —¿Qué quieres de mí? Si quieres que otra vez le saque la mancha al bóxer de Yoongi, antes de que te descubra, olvídalo.
—Noooo... ya aprendí mi lección, jamás volveré a utilizarlos para limpiarme mientras como pizza —rasque mi nuca ante tal recuerdo, nunca olvidaré el miedo que sentí cuando vi una gran mancha de aceite en su bóxer de Kumamon que tanto ama, sólo a mí se me ocurre tomarlos para limpiar mis manos después de tomar la pizza.
—Ok, dime entonces qué quieres de esta hermosura, si es mi cuerpo no puedo, si no Nam me matara —deje salir una risa, me encanta sus ocurrencias, la forma en que puede crear una atmósfera de mucha paz y seguridad.
—No sería capaz de profanar tan sagrado monumento —ahora era él quien reía —Quiero pedirte que me ayudes a preparar algo romántico para Yoongi, a estado un poco triste estos días y quiero animarlo.
—Mmm... ya veo —llevó la mano a su barbilla y abultó sus labios, eso solo indica que está pensando en una idea —Tengo una idea... Podríamos preparar una cena romántica, llenar de globos en forma de corazón el techo y hacer un camino con pétalos de rosas, todo iluminado con muchas velas.
—No sé si Yoongi sea de ese estilo de romanticismo.
—Vamos a todos les gustan ese tipo de detalles... aunque sea un gruñón y un asocial, me imagino que debe tener su lado tierno —se acercó a la mesa en la que tenía varios de los ingredientes que estaba utilizando para preparar el desayuno y se sentó en uno de los banquillos —Además si me dices que está triste, ¿no crees que un detalle así logrará subirle el ánimo? Con eso podrías hacerle saber cuánto lo amas y lo preocupado que estás de él, de verlo bien y feliz.
