chains of hate

one

Jung Hoseok, era el menor de cinco  hermanos; venían de una tribu llamada "waiku" un poco alejados de la ciudad, siendo rodeados únicamente de la naturaleza; poseían habilidades curativas heredadas de sus antepasados; vivían en comunidades, no todos tenían la dicha o desdicha de tan necesaria habilidad

Hoseok uno de ellos, único doncel de su familia; con un característico cabello blanco que según los más antiguos, la madre tierra lo había bendecido.

A pesar de ser tranquilos y casi no salir al exterior por sus costumbres, eran discriminados por los llamados "citadinos" 

Por ese motivo sus padres lo protegían incluso de más, por ser el más pequeño, lo que ocasionó cierto rencor entre sus mayores; creían en el favoritismo hacía el de cabellos blancos

El joven de 15 años, corría alegre por los campos de su aldea, le gustaba mucho compartir con las ovejas que criaban; eran como sus amigos, no se quejaba de ello

Muchas veces intentaba hablar con sus hermanos pero, estos lo evitaban haciéndolo sentir mal, y solo. Sin embargo; eso no evitaba que amara a su familia, sabía que no eran perfectos

—¡Hoseok!—lo llamó su hermano mayor  Chul, mientras jugaba con las ovejas, rápidamente se acercó

—¿pasa algo hermano?—se acercó al mayor un poco dudoso

—no realmente, solo quería decirte que, hemos estado muy alejados últimamente así que queremos compartir un poco; después de todo eres nuestro hermanito; mañana podrás acompañarnos a pastorear cerca del río Apon ¿que te parece?

Sus ojos se iluminaron ante aquella propuesta, era cierto que nunca compartían y le alegraba en demasía que sus hermanos quieran pasar rato con él; aunque sus padres no lo dejaban salir tan lejos por lo que bajo la mirada un poco triste

—pero no me dejaran, está muy lejos...

—oh vamos Seokie tú solo diles que irás un momento; además no estarás sólo, no hay nada que te nieguen— el menor lo pensó por breves segundos y dijo

—¡está bien!— con una gran sonrisa salió en dirección de su madre

...

La señora Jung se encontraba en la cocina, preparando los alimentos para cuando su esposo llegara, a decir verdad le preocupaba la salud del hombre; este no descansaba ni un momento y aunque intentó decirle de mil maneras simplemente era testarudo

—¡mamá!— la voz del pequeño llamó su atención

—que pasa mi pequeño Seokie— acarició sus cabellos blancos como la nieve

—¿me dejarías pasear por el río Apon mañana?

—Hoseok, sabes que no me gusta que salgas solo, es muy peligroso

—te prometo que no iré solo mamá, Chul me dijo que los acompañara, también me cuidare mucho, ya estoy grande

Su madre no quería aceptar tal cosa, pero era tal su alegría que no tuvo corazón para negarle su petición

...

—¿crees que sea buena idea?

—¡claro que sí! pagaran muy bien te lo aseguro; solo quiero que estén seguros y no se acobarden ¿está claro?

El mayor de todos habló, Chul, era un hombre que estaba comprometido con una hermosa chica de su tribu, a decir verdad no la amaba, era un ser egoísta y cruel, por ello era como un líder entre sus hermanos, siempre lograba que acataran lo que decía

—sabes que no lo haremos, puedes confiar; después de todo nada ganamos llevandote la contraria

El tercero de nombre, Kai era un joven con un carisma radiante, aunque muy pocas veces se le veía de esa manera, estaba enamorado de la novia de su hermano, pero nada podía hacer, la chica solo lo veía como un niño, aunque no lo fuera