En esta historia contaremos, como una ladrona y asesina que no posee ningún dón, ayuda a los héroes a cumplir con un trabajo de investigación con la condición de que al terminar el trabajo, la dejen en paz y que eliminen/destrullan cualquier expedi...
-bien, aquí estamos - dije mientras la bajo - ahora entra tu primero, si nadie te dirije la palabra no hables, solo quédate quieta y después de unos minutos entraré yo - le explique mientras la empujaba un poco para que entre.
-sí está bien - camina hacia la puerta que estaba medio abierta, la empuja un poco para entrar mirando por ambos lados, buscando a alguien pero mientras se alejaba de la puerta para hacerce notar un poco más, tropeso con un oficial el cual no la noto ya que corría hasta una multitud que estaba peleando.
Narra la escritora.
Eri al ver que había alboroto quería salir, pero la puerta estaba cerrada y no alcanzaba el picaporte, al ver que nadie se había percatado de ella, se alejo un poco y se puso cerca de la puerta para esperar a que Aiko entrará y le ayudará, no pasaron ni dos minutos cuando un hombre, se acercaba corriendo hacia ella para agarrarla. Pero antes de siquiera tocarla, Aiko entra de repente enviandolo de una patada hacia el techo.
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(Algo asi)
Tras eso, se formó un largo momento de silencio, Eri por el miedo se hizo volita en el suelo tapando sus orejas y cerrando sus ojos con fuerza, Aiko dirigía su mirada hacía los sujetos que estaban peleando, los tipos se sentaron en silencio, mientras algunos oficiales miraban al tipo que trató de tocar a Eri inconsciente, otros sólo miraban a Aiko, todos quietos ante la mirada de la chica.
Luego de unos segundos, Aiko toma al tipo que golpeó dandoselo al primer oficial que estaba cerca de élla, se aleja y se acerca a la mesa de entrada.
-vengó a una visita, me dijeron que estaba en esta comisaría - comienza a hablar sonriente con el oficial, como si no hubiera pasado nada.
-puede decirme el nombre y relación que tiene con el detenido, por favor - se notaba el nerviosismo en su voz.
- Akeno, Akeno Sén, yo soy s- .... soy amiga de la familia.
El oficial busca su nombre en el computador, saca unos papeles poneniendolos en la mesa junto con a un lapicero.
-Tiene que rellenar y firmar estos documentos para poder ingresar.
-bien - agarró el lapicero y empezó el tramite, a su alrededor los oficiales empezaron a separar a los detenidos para ponerlos en las celdas, al ver el movimiento a su alrededor, Eri se levanto de donde estaba y se acerco corriendo hacía Aiko aferrándose a élla, está al sentirla en su pierna, termina de firmar el papel, la toma en brazos y la pone en la mesa - tal parece, esta niña está perdida, deberían encargarse de ella.
-ah, Sí. Hola pequeña, ¿como te llamas?
-me llamo Eri.
-bien, puedes decirme como se llaman tus padres? - pregunto con una sonrisa.
Antes de que Eri pudiera responder Aiko la interrumpió.
-Listo, ¿donde esta? - mirándole con notable molestia por la sonrisa que le dio a Eri.
