Capítulo Siete

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Jeongin yacía en la cama de su cuarto adolorido, trataba de descansar pero el dolor era extremadamente fuerte, se sentía tan débil que podría jurar desfallecer.

Anteriormente había llorado a mares a la hora de encontrar la sortija de matrimonio de Hyunjin tirada como si de un papel usado se tratase. Más sin embargo se tranquilizó pensando que tal vez su marido se le había olvidado y se le cayó en un descuido.

Eso quería pensar...





- El joven Jeongin aún no se ha presentado señor Hwang.- dijo con temor por la mirada de su jefe.

- ¿No?- Hyunjin dio la última calada a su cigarrillo para luego apagarlo y tirarlo al cesto de basura.- Llámalo.

- A-Ahorita mismo señor.- El empleado sale de la oficina de su jefe y se dirige a pasos rápidos a la recepción.

Una vez en un lugar dicho, avisó a las señoritas que debían llamarle a Jeongin, éstas asintieron y tomaron el celular de la mesa y marcaron el número de Jeongin.

Una, dos, tres llamadas y ninguna fue correspondida.

Los presentes estaban preocupados, ya que Jeongin nunca tardaba en contestar cuando se trataba del trabajo.

-¿Crees que haya pasado algo malo?- Una de las señoritas pregunto preocupada, los otros dos solo se vieron y suspiraron.

El empleado cuyo nombre es Seon woo emprendió camino nuevamente a la oficina de Hyunjin para avisar el problema. Su corazón estaba a mil y sus pasos eran torpes, con tan solo pensar que podría recibir algún grito por parte de su jefe, lo atormentaba.

Al estar frente de la puerta de la oficina de su superior, llegó a escuchar un par de gemidos combinados con jadeo. Abrió sus ojos sorprendidos al reconocer los gemidos de Felix. Sin esperar mucho, retrocedió a pasó lento y decidió mejor no decirle nada al jefe hasta que estos acabarán con sus acto carnal.









Las risas de los infantes se escuchaban por toda la casa, y el causante de estas risitas era Jeongin. Adulto e hijos jugaban felizmente a las atrapadas.

Los tres disfrutaban de un buen momento a pesar que el otro integrante de la familia no esté.

-Su papi ya está viejo.- Jeongin se quejó cansado y algo dolorido por aquello sus niños rieron y no dudaron en ir a abrazar a su padre.

-Papi ¿podemos ir por helados?.- TaeHyung habló, Jeongin jadeo cansado e hizo una mueca de dolor asustando a sus pequeños.-¿Te lastimamos papi?- Ambos pequeños se alejaron un poco de su padre con preocupación.

-No, tranquilos pequeños. Yo me lastimé solo.- El adulto río tratando de tranquilizar el ambiente.

los niños están tan convencido por la respuesta, se acercaron a su padre con cuidado y lo abrazaron.

-¿Y si nos vamos a mejor donde la abuela?- Propuso Seungmin.

-¡Sí! Papi, mejor vámonos a vivir donde la abuela- TaeHyung sonrió abrazando más a su padre.

-Cuando tenga vacaciones en el trabajo prometo llevarlos donde la abuela.-Ambos infantes saltaron de alegría abrazándose.

Jeongin sonrío al ver aquella escena, los últimos días no había logrado apreciar a sus pequeños y convivir juntos.










La noche llegó, Jeongin con algo de dificultad cocinaba algo rico para sus hijos. Los pequeños hablaban entre ellos esperando la comida, los tres estaban muy felices, pero lamentablemente las sonrisas de los tres desapareció al escuchar la voz de Hyunjin hablando por teléfono.

Seungmin al ser quien sentía un poco de temor y algo de rencor por su padre miró por preocupación a su papi Innie.

Jeongin le regresó la mirada a Seungmin con una leve sonrisa para tranquilizarlo; el joven adulto al escuchar la puerta siendo abierta sintió un escalofrío recorrer todo su cuerpo.

-Luego te regreso la llamada... -Dijo Hyunjin antes de cerrar la puerta de la casa.- Jeongin...

-¿Qué pasó?

-¿Por qué no atendiste el maldito de teléfono?- Hyunjin tiró su saco al sillón.
Jeongin suspiró cansado, apagó la estufa y se dio la vuelta.

-Estaba atendiendo a los niños.- Hyunjin mira los infantes y se acercó a Jeongin.

-Vete para el cuarto Jeongin.-Ordenó. Como un niño haciéndole caso a su padre, Jeongin se dirigió a la habitación sin perder más tiempo.

Los infantes quedaron confundidos, pero lo único que recibieron por parte de su padre fue un "Vayan a su habitación y nos hablan hasta mañana" los niños de la casa obedecieron yéndose a su habitación.








...




Hyunjin entró a la habitación casi azotando la puerta haciendo que Jeongin se asustara y temiera por lo que podría pasar. El mayor cerró la puerta y de paso le puso seguro logrando que Jeongin empezara a desconfiar más.

- Jeongin... ¿Acaso no sabes el problema que te has metido?- Jeongin bajo su cabeza temeroso haciendo superior a Hyunjin.-Le dije a Seon woo que te llamaran y mi sorpresa es cuando voy a la recepción.

-L-Lo siento H-Hyunjin, estaré más pendiente del celular de ahora en adelante.-Sus palabras salieron como pudo, su cuerpo se encontraba temblando de miedo y su corazón estaba demasiado acelerado.

-Con un "Lo siento" no arreglarás nada Hwang Jeongin.-Sus palabras salieron con agresividad causando más temor en quien simplemente mantenía su cabeza agachada.

Fueron cuestiones de segundos cuando Jeongin sintió el cuerpo de Hyunjin encima de, sus manos capturadas por las ajenas dejandolo completamente inmóvil.

-Te enseñaré quién es el que manda Hwang Jeongin, y más te vale mantenerte callado.-En los ojos el menor se reflejaba el miedo y cada vez estaban más rojos por las lágrimas retenidas. Su corazón latía desesperadamente y a la vez sentía un revoltijo en su estómago.-Y creo que tú muy bien sabes que mereces esto cada día estás más necio y haces lo que se te da la gana.

-P-Perdóname Hyunjin. Estaré pendiente del traba-

Hyunjin callo a Jeongin con una cachetada.-No Jeongin. Te tendré que dar una lección, porque si te la dejó pasar ocurrira de nuevo. Y no quiero que estropees mi carrera maldita sea. Te recuerdo que en unos días mis padres vendrán a visitarnos, ¿y crees que pensarán al ver que me casé con un imbécil como tú?

Sus palabras salieron sin compasión y con odio logrando que soltaras lágrimas. Aquellas palabras se clavaron como pequeñas cuchillas en sudar el corazón pero no parecía importarle.

-H-Haré todo lo que quieras simplemente n-no me pegues.-Suplicó mirándolo a los ojos contrarios.

-¿Lo que yo quiera?- Hyunjin sonrío, Jeongin asintió con temor y poca seguridad.-Quiero que cuando mis padres se vaya me des el divorcio.

























Holiiii, volvi jojojo










VIOLENT ; HYUNIN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora