Amistad o Amor: La historia Connaya, Catlette, Lunekko y más [RESUBIDA]

Capítulo 2: "Nueva amiga, vieja enemiga"

   ¡Hola!

   Agradezco a todos los que hayan leído el capítulo anterior, en verdad gracias por leer.
   Ahora sí, el capítulo de hoy...

UUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU

   El cielo del lunes ya se había oscurecido, dando lugar a una fría noche. Nuestros héroes estaban durmiendo tranquilamente, debido a que no había villanos cerca, o bueno, eso creían ellos.
   Aproximadamente a las cuatro de la mañana, una joven de cabello blanco como la nieve y traje negro como el ébano estaba excavando en medio de un sombrío bosque, en compañía de sus polillas.

— Por fin es mío — Dijo Luna sonriendo cruelmente y hablando de manera psicópata, con su atuendo lleno de tierra y cargando el cofre con sus dos manos un poco más arriba de su cabeza. — ¡Finalmente, es mío!

(...)

   Al día siguiente, Connor, Amaya y Greg se encontraban caminando por los pasillos de la escuela. Todo era tranquilidad hasta que vieron en un rincón a Marie y Jenny en un pequeño puesto vendiendo collares, pulseras, aretes y anillos hechos de acero y decorados con piedras preciosas en tonos azules y violetas, como si fuera un cielo nocturno lleno de estrellas.
Lo que les pareció extraño a los jóvenes protagonistas, es que todos los estudiantes utilizaban ese tipo de accesorios.

— ¡Hola, chicos! — Saludaron ambas jóvenes con una gran sonrisa y repletas de los accesorios que vendían.

— Hola, chicas — Saludaron los tres con una pequeña sonrisa.

— ¿Les gustaría comprar algún accesorio?, es para recaudar fondos para que nuestro sueño de un vivero en el patio se haga realidad — Dijo Jenny de manera alegre.

— Sí chicos, mi padre trabaja en una joyería y me entregó varias de estas piezas para colaborar, son únicas en su clase — Explicó Marie mostrándose sonriente.

— Compren alguna chicos, les aseguramos que no se van a arrepentir — Aseguraron Marie y Jenny con una sonrisa exageradamente extraña, mientras que sus ojos se tornaron de color morado.

— Se ven geniales chicas, pero lamento informarles que ninguno de los tres tiene dinero — Dijo Amaya algo incómoda mientras sonreía y a la vez miraba a sus dos mejores amigos, los cuales sentían la misma sensación que ella.

— Oh, por favor Amaya, aunque sea un anillo — Suplicó Jenny haciendo puchero, sin abandonar el nuevo color que se había formado repentinamente en sus iris.

— Nos encantaría, pero nuestra economía no es del todo buena — Dijo Connor también incómodo pero sonriendo de todas formas.

— De igual forma, gracias — Agradeció Greg con amabilidad y algunos nervios. — En fin, ya nos vamos.

   Casi corriendo, los chicos se alejaron del pequeño puesto de joyas.

— Me preocupan Marie y Jenny, se veían bastante raras y ellas no son así — Confesó Amaya algo preocupada.

— Es cierto, y espero no ser el único que notó el cambio de color en sus ojos — Dijo Connor con seriedad.

— No lo eres, yo también lo noté, presiento que algo malo está pasando y debemos detenerlo — Dijo Greg serio y algo pensativo. — Vayamos a investigar.