𝐂𝐑𝐔𝐄𝐋 𝐒𝐔𝐌𝐌𝐄𝐑 | Chaelisa (Spanish Ver.)

Tengo algo que contarte.

El amor es como una rosa

Nena, déjala crecer

Nadie sabe los secretos que tú conoces

- White Roses, Charli XCX

Es una noche de verano cuando Lisa se encuentra sentada en la cama de Rosie, con la preocupación escrita en su cara mientras observa en silencio a su mejor amiga caminar en círculos por la habitación, mordiéndose las uñas cuidadas -las que Lisa pasó una hora entera pintando ese mismo día-, y sabe que debería enfadarse porque, qué mierda, dibujó esas estrellas en las uñas de Roseanne con todo el amor y el cuidado del mundo, pero Rosie parece estar a dos segundos de explotar y lo último que quiere Lisa es empeorar la situación de su amiga.

"Así que", comienza Roseanne vacilante, pasando sus palmas sudorosas por la falda, "tengo algo que contarte. Un secreto. Uno grande".

Lisa frunce el ceño. "No habrás matado a nadie, ¿verdad? Porque no quiero ir a la cárcel. No puedo escuchar a IU allí".

"Claro que no", resopla Rosie, ocupando el espacio vacío que le han dejado en la cama. "Pero es... algo importante para mí... Quiero decir, nunca le había contado a nadie sobre esto".

Los labios de Lisa se curvan, y luego pone sus manos sobre las temblorosas de Rosie, tratando de hacerle saber que está aquí y que está dispuesta a escuchar. Las manos de Rosie están frías a pesar del calor y a Lisa le duele el corazón. No hay nada que odie más que ver a su persona favorita en el mundo tan perturbada. "Cuando estés lista".

Rosie cierra los ojos, respira profundamente y asiente. Luego, lo más despacio posible, dice: "Creo que me gustan las chicas".

Oh. Lisa no puede decir que no lo vio venir, porque lo hizo. De verdad, de verdad lo vio. Una persona heterosexual no podría tener tantos pósters de miembros de grupos de chicas y actrices occidentales en su habitación. O tantos discos de Lady Gaga. O un pin del arco iris luciendo bonito en su mochila. Además, hasta donde se conocían, Roseanne nunca mostró interés por los chicos, igual que Lisa no lo ha hecho y sabe que nunca lo hará.

Ahora, ¿por qué el corazón de Lisa amenaza con saltar de su garganta por un secreto que, en el fondo, ya conocía?

"Oh–" Lisa dice cuando sale de sus pensamientos, apretando la mano de Rosie mientras una cálida sonrisa se extiende por su rostro. "Eso es... eso es genial, Rosie, de verdad. Me alegro mucho de que confíes en mí lo suficiente como para decírmelo".

Rosie suelta un suspiro, los hombros caen de puro alivio, y una sonrisa propia se apodera de sus labios. Lisa no podría apartar la mirada ni aunque su propia vida dependiera de ello. "Dios, estaba tan nerviosa. No es que pensara que fueras a pensar que soy desagradable o algo así, no, es sólo que es la primera vez que lo digo en voz alta y todo eso", Rosie hace una pausa por un momento, luego la sonrisa en su rostro se suaviza, sus ojos se vuelven vulnerables. "Me alegra que seas la primera en saberlo".

Lisa se ríe, y ella sabe que probablemente parece una tonta ahora mismo con lo amplia que es su sonrisa, pero le reconforta el hecho de que no se atreve a preocuparse. "No eres tan hábil, ¿sabes? Llevas toda la semana cantando Born This Way".

Rosie se burla, pero es evidente que le cuesta mucho no reírse. "Por favor, siempre estoy cantando Born This Way".

"Ese es mi punto, señorita Park".

Rosie no pierde tiempo y golpea a Lisa con una almohada como venganza. Lisa consigue arrebatar la almohada del agarre de Rosie, sonríe con maldad cuando la otra chica se precipita fuera de la cama, y hace crujir sus nudillos antes de anunciar: "Oh, ya está".