Una historia donde después de asesinar a Makima, Denji queda tan perturbado por todo lo que ha vivido, que ha decidido acabar con todas sus reencarnaciones y los jinetes, empezando por Nayuta. Spoiler: Escencia 🗿
-Te volviste un completo...cabrón-dijo Kishibe extendiendo sus piernas en la banca-Sabía que estabas loco, pero matar a una mocosa, no te veía capaz.
-Es el demonio control, sabes...que no quedaba otra opción.
-¿Y lo de tus subordinados? Has perdido una gran cantidad en esté mes.
-Perdieron contra demonios débiles y les conseguí una utilidad, deberían sentirse orgullosos de caer por Chainsaw Man.
-No estoy de acuerdo por tus métodos, pero mucho no puedo hacer.
-¿Solo era eso?
-De hecho...tengo un enemigo muy cerca, y está vez, es un jínete.
-Dame su ubicación, pelearé con todo y me lo comeré.
-No es tan fácil, esté demonio no caerá tan fácilmente, es inteligente, estrátegico, pero conserva una actitud serena.
-¿Qué me quieres decir con eso?
-Necesito que pases tiempo con ella , si acabamos comprendiendo sobre ella, podemos indagar sobre las habilidades de los otros Jínetes del Apocalipsis, y saber como exterminarlos por completo.
-No tengo tiempo para eso...
-No era una pregunta-dijo Kishibe chiflando y callando al público en el parque, abstentas de la conversación de ambos Devil Hunters-Ya viene.
-¿Por qué debo de encargarme yo y no puedo matarla?
-Porqué está interesada en ti...
-¿Y qué garantías tienes de que yo cumpliré con lo que me pides?
-Si no lo haces...no te diré como regresar a la vida a Aki y Power.
Denji abrió los ojos de manera sorpresiva, conocía a ese viejo de mierda, era mentiroso pero estaba seguro de que en eso no le mentía.
-¿E-Es un chis...?
-Yo no bromeo, a menos que esté borracho.
-¡está bien!-dijo Denji levantándose de la comodidad de la banca-¿Quién e...?
-Soy yo...
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<<Esos ojos>>pensó Denji con furia, tanta que no podía contener las motosierras bajo sus brazos.
-Tu misión es simple, cuida de Kiga, mantente cerca en todo momento, saca información y en cuánto no nos sirva, siéntete libre de devorarla.
-¿No tendrías que decírmelo en privado?-pregunto el rubio intentando calmar sus instintos asesinos.
-Puede leer la mente, es inútil ocultarle información, estúpido-dijo Kishibe bebiendo de su licor-Te ayudará en la búsqueda del demonio control otra vez.
-¿No la maté?
-Ella vuelve, no es tan fácil asesinar a un Jínete, por eso usaremos está carta-contesto el viejo despidiéndose con la mano, desapareciendo del campo de visión de ambos.
-Motosierra-dijo Kiga apuntándole el pecho-Estás en un cuerpo con un patrón igual de sanguínario que tú.
-¿Es verdad que puedes leer la mente?-Pregunto Denji.
-Si-respondió el Demonio del hambre-Y quieres matarme ¿quieres descargar tus instintos asesinos?
-¿Dices que puedo matarte?
-No tendría importancia-dijo Kiga viendo como Denji se transformaba y le atravesaba el pecho con las motosierras cercenándola una y otra vez, todos los cíviles corrían de ahí en busca de ayuda, pero Denji ya no escuchaba los gritos, solo la quería matar. Sin embargo, Kiga no era cualquier demonio, tan solo con el tacto de sus dedos hizo que las motosierras del rubio se derritierán y con un solo dedo, le perforó un ojo.
-Mi-Mierda-rugió Denji conteniéndose ,pero su cabeza ya no era lo mismo, guardo las motosierras y sacó las cuchillas escondidas debajo de su abrigo. Kiga chasqueo los dedos y una patineta apareció en sus manos, comenzó a rodar hacia él esquivando todas y cada una de las cuchillas arrojadizas, el Devil Hunter tomó la katana de su espalda y en una estocada casi rebana al demonio en dos...pero se confió, Kiga estaba detrás de él y lo tocó en el cuello. El Rubio cayó al suelo, los músculos de su cuerpo lo estaban consumiendo y desapareciendo, quedando solo hasta quedar hecho huesos y piel. Kiga solo le estaba haciendo pasar el 40% del hambre mundial, y eso no era precisamente algo bueno para tan solo unos segundos.
Denji seguía consciente pero no podía moverse, cada hueso le pesaba como cincuenta toneladas, y su cuerpo se sentía tan frágil como una ramita. Esos ojos, solo le recordaban a una persona. Ella se sentó encima de las costillas del Motosierra y lo acarició en el craneo.
-Deberías pensar más antes de atacar ,la próxima vez puede ser el fin.
Denji no pronunciaba palabra, no podía, sentía la boca más seca que un desierto.
-Puedo darme cuenta de que tienes lapsos esquizofrenicos...tu cordura pendé de un hilo-Kiga lo tocó en el pecho y su cuerpo se restableció por completo.
-T-Te voy...a matar-dijo Denji intentando levantarse, pero ya estaba en su límite, esté demonio era más poderoso.
-Restablecí tu salud, pero no al cien por ciento, como dicen los humanos, mejor prevenir que lamentar.
-Tú no eres un humano, pedazo de mi-mier-mierda...
-Y anatomicamente tu tampoco-respondió Kiga aplastándole el cuello con su tacón-conviviremos un tiempo para saciar nuestros propósitos, así que calma tus ansias, pronto podrás matarme, y yo cumpliré mi misión.
Eso fue lo último que escucho el rubio hasta quedar totalmente inconsciente.
