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Samantha estaba metida en su carpa, tres niños de quince años hablaban, mientras seis niños de unos once y doce años correteaban por ahí.
Samantha tenía la manta de su carpa abierta dejando ver todo lo que pasaba afuera, ella jugueteaba con sus manos mientras pensaba.
Max se dio cuenta de que su hermana no jugaba con los demás niños así que se acercó.
— ¿Que te pasa, enana? — se sentó a su lado
— No me llames enana — dijo sin dejar de jugar con sus manos
— Pero, ¿que te pasa? — le puso la mano en el hombro y ella lo miro
— Estoy preocupada por Mer — Max se rio
— No estes preocupada por el, recuerda, es un Dixon y es inmortal — la niña sacó una pequeña sonrisa
El sonido de la radio hizo que los niños se acercaran corriendo hacia ella.
— Transmitiendo en frecuencia de emergencia. Me aproximo a Atlanta por la carretera 85. ¿Alguien me recibe? Respondan. — Amy dejó caer la leña que tenía en las manos para coger el walkie-talkie — ¿Alguien me oye?
— ¿Hola? — habló Amy
— ¿Me oye alguien?
—Le recibo, cambio
— Si me oye alguien, respondan, por favor. Transmito en frecuencia de emergencia. Me aproximo a Atlanta por la carretera 85. Si alguien me recibe, respondan, por favor.
— Estamos en las afueras de la ciudad — dice Amy muy nerviosa — ¡Mierda! ¿Oiga? — nadie responde — ¡Oiga! ¡No le he podido avisar!
— Inténtalo otra vez. Vamos, hijo, tú manejas mejor ese trato — Shane clavo el hacha en la madera y cogió el walkie-talkie
— Hola. ¿Quien ha hablado sigue ahí? — nadie responde — Aquí el agente Shane Walsh, trasmitiendo a desconocido — siguen sin contestar — Ya no está
— Hay otros. No estamos solos — dice Lori
— Ya lo sabíamos. Por eso la dejé encendida
— Para lo que ha servido...
— Vale
— Llevo una semana diciendo de exponer carteles para que eviten la ciudad — se quejó Lori
— No sabe donde se ha metido — interrumpió Amy
— Bueno no ha habido tiempo — Shane habla tan normal
— Tenemos que sacar tiempo
— ¿Y a quien coño mandamos? — pregunta Dale
— A mi. Dame un vehículo — Ruby la mira con Carl sentado en sus piernas
— No, mamá, tú no vas a ir, no quiero que te pase nada
— Nadie irá solo a ningún lado
— Si, señor — Lori se va con Carl detrás que salto de las piernas de su hermana
— Tú quédate, chaval. Venga, tranquilo — Shane se va por donde se a ido Lori y Carl va corriendo a abrazar a Ruby
[...]
Espero que os guste. Tengo que decir que no soy escritora profesional, lo siento si es muy aburrida o lo que sea
