Soukoku | Week +18

Lingerie | Bottom Chuuya

- ¿Haz pensado en usar lencería?.- pregunto el castaño de la nada.-

- No, mucho menos si es para ti.-

- ¡Que cruel eres, Chuuya!~.-

Todo hubiera quedado así, de no ser porque luego de eso la maldita momia se negaba a tener cualquier tipo de interacción sexual hasta que no usará lencería, ¿qué clase de mala broma era esa? Pero bueno.

Al principio lo tomo bien y dijo que no ocupaba de él, y fue así como recurrió a juguetes sexuales ya que era la opción más viable si su pareja no quería tener sexo, ¡Pero dios! Luego de tres semanas enteras solo recurriendo a juguetes se hizo tan aburrido al punto en el que prefería solo quedarse con las ganas en vez de introducirse un maldito dildo del tamaño de su antebrazo.

Se sentía como un jodido adolescente con las hormonas al tope, pero no había tenido sexo de verdad en tanto tiempo y su vida sexual casi siempre es activa, a veces podían hacerlo dos veces por semana, otras veces no hacerlo dos semanas seguidas, pero el punto es que ya se había acoplado a todo, y el no tener un poco de atención por parte de su pareja lo estaba frustrando. No tenía de otra.

Lencería será.

Le aviso a Dazai acerca de su salida, cosa que el castaño dio el visto bueno y dijo que más tarde saldría ya que Kunikida lo amenazó con algo con tal de que acabará todos sus informes atrasados desde hace meses. Dazai es Dazai.

Se fue junto con Huguchi, sí, Higuchi. No quería ir con Akutagawa, mucho menos con Tachihata o Gin, y ni se diga Kouyou que seguramente lo reprenderia por comprar algo así con tal de tener la atención de su pareja.

- Esto puede quedarte bien. - mostro un traje estilo conejita playboy, pero ocupaba más que eso. -

- Debe haber otra cosa en esta tienda, algo más provocador. - porque sí, estaba tan desesperado que quería prender a su pareja en solo un minuto para que le follara de una vez por todas. -

- Oh... Esto es lo que buscas. - y dios mío, era justamente lo que necesitaba. -

[. . .]

Ahora mismo se encontraba en la casa, había llegado temprano a pesar de que estuvo horas eligiendo un buen conjunto de lencería, pero al final lo encontró y no puedo estar más contento por encontrar la correcta.

Estaba preparando la cena para cuando su pareja llegara, y ciertamente eso no tardo demasiado puesto que pudo oír la puerta del departamento siendo abierta antes de que la ya conocida voz resonara por toda la casa.

- ¡Chuuchu! he llegado. - anunció su llegada. -

- Samu'~... Ven y ayudame con la cena. - trato de usar el tono de voz más seductor que pudiera. -

- Tu fea voz no será suficiente para seducirm-.... - había caminado hacia la cocina, encontrándose con el pelirrojo subido sobre el mesón cerca de estufa, lo que le llamo la atención fue solo verlo en mandil. -

- ¿en serio? Que tristeza.- sus piernas cruzadas fueron lo que más llamo la atención del castaño.-

- Un feo mandil no logrará seducirme.-

- ¿En serio?...- apenas noto las medidas de red que portaba el pelirrojo, haciendo que inconscientemente se acercara para poder apreciar esas hermosas piernas.-

- ¿Qué hay debajo de eso?...- el pelirrojo sonrió de forma maliciosa y le aventó una botella de lubricante al más alto.-

- Descubrelo.- simplemente no aguanto más y se abalanzó sobre el más bajo, besandolo de forma desesperada y apretando sus muslos con aquellas medias de red.-