En un mundo donde los hombre lobo están en guerra con las Harpías, hay dos seres que se aman sin importar la guerra que está ante sus ojos ya que en este momento solo existen ellos dos y el mundo no es mas que un espejismo.
-¿Por qué tus alas son tan suaves?-Preguntó mientras acariciaba con delicadeza aquellas plumas que adornaban a su pareja de rubios cabellos.
-No lo sé-Cerro de a poco sus ojos era agradable la sensación que el licántropo le proporcionaba, este al ver a su pareja casi dormido se acerco a su labios y cuando estos ya rozaban los ajenos se apartó y siguió acariciando sus alas.
-Te amo-Susurro en el oído de su contrario haciendo que esté se estremeciera, el río ante eso y lo abrazo siendo correspondido por el alado.
-Y yo a ti-De a poco los dos quedaban dormidos aún abrazándose.
Ninguno de los dos sabía cómo habían terminado siendo pareja y tampoco les importaba solo les importaba saber que el otro siempre estaría ahí, lastima ninguno de los dos sabía que esa noche habría una casería......
El azabache se encontraba en su casa que estaba en medio del bosque, estaba siendo regañado por su padre pero no le importaba, su mente solo estaba dando vueltas en el plan que le había propuesto el rubio escapar ir a un lugar más allá del bosque, del cielo, solo que se tenía que decidir en ese momento ya estaba por anochecer y su amado se iba a ir en la noche.
-¡Damien! Te estoy hablando-Miro furioso a su hijo quien había vuelto de su trance y lo miraba confundido- Te estaba diciendo que tienes que dejar de estar vagando por ahí, no te das cuenta que un día yo moriré y tú quedarás como el alfa de la manada?!-El menor solo rodó los ojos y se cruzó de brazos, a él no le importaba esa manada para el todos ahí eran una mierda, al único ser con el que aceptaría tener una manada sería con su amado ángel.
-Me da igual -Se retiro a su cuarto sin importarle los gritos de su padre, armó su maleta y una nota que decía "Nos vemos en el infierno", ya tenía todo listo para cuando se hiciera de noche y tuviera que ir al punto de encuentro de su pareja.
...
El rubio se encontraba con sus amigos contándoles su plan, estaba muy emocionado y sus amigos asustados, los dos rubios se miraron entre si para luego ver a el de ojos azules que ahora brillaban cual estrellas, enserio tenían miedo de perderlo pero no sabían como decirlo.
-¿No crees qué es peligroso?-Hablo un chico rubio con una cicatriz en su ojo, mientras agarraba las manos de su amigo quien le sonrió y negó con la Cabeza, el otro que quedaba solo miraba todo muy preocupado.
-Estaré bien Leo y Tweek-Dirigió su mirada al último nombrado quien sostenía un termo con cafe-Tengo una idea! ¿Qué tal si se escapan conmigo y Damien?-Sus amigos se quedaron paralizados analizando si era verdad lo que estaba diciendo el otro.
....
No lo podía creer, no quería hacerlo, su novio, su amado, su ángel, estaba muerto en el suelo sus plumas antes blancas ahora eran teñidas por el rojo de su sangre, se lamentaba, el debió de hacerle caso cuando este le dijo que había algo raro y que era mejor irse cuanto antes, pero no, no le hizo caso y ahora el estaba muerto, lastima su lamentó no duro mucho ya que su dolor fue terminado por una bala de plata que atravesó su pecho justo en su corazón.
Al final los bandos nunca supieron quienes fueron los agresores, excepto por dos rubios. Pero de que les serviría saber si eso no los iba a revivir.
Al final ellos tenían razón las plumas y el pelaje no se pueden mezclar.
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Será qué alguna vez Damien y Pip podrán ser una pareja normal?
Lo sabremos en el próximo episodio.
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Pequeñas historias Dip
RandomMini historias que se me ocurren de esta pareja ya que me da flojera seguir las que ya tengo Créditos al autor o autora de la imagen de la portada