𝐕𝐄𝐍𝐆𝐄𝐀𝐍𝐂𝐄 - 𝐊𝐀𝐈 𝐏𝐀𝐑𝐊𝐄𝐑 - 𝐓𝐑𝐀𝐃𝐔𝐂𝐂𝐈𝐎𝐍

SIX

Capítulo seis – ¡La bruja impresionante ha vuelto!

Bonnie está haciendo el hechizo de localización para el Ascendente dentro de la casa de huéspedes ya que necesita tiempo para hacer el hechizo sola, mientras que Damon hace aviones de papel con el periódico y los arroja al patio delantero.

Lorna está tratando de hacer un hechizo simple para recuperar su magia, sentada en el porche y Kai solo está sentado a su lado, observándola hacer el hechizo. Hay plumas esparcidas por todo el suelo a su alrededor.

–Ocoros Mecante, Alegra Subditos. Olo Santire, Dis Et Brav.

Ella suspira cuando se da cuenta de que no ha funcionado. –No se siente bien. ¿Quizás estos cantos mágicos han expirado?

Damon deja caer el periódico al suelo. –Tal vez no tienes práctica y ahora apestas con la magia.

–Ignóralo, Lorna. Imagina que es una máquina de ruido blanco. Así es como solía desconectarme de mis hermanos. Crecí con un montón de hermanitas y hermanos pequeños. Ya sabes, todos ellos constantemente parloteando–. Kai se acerca a ella. –Pero me enseñó a concentrarme–. Se inclina directamente hacia su rostro como si estuviera a punto de besarla donde ella se congela en su lugar. Dios.

–¡Tranquilo, hermano mayor! Ella no te conoce. Al menos cómprale un trago–. Damon se entrelaza, haciendo que Kai esboce una sonrisa.

Lorna cierra los ojos y se calma. Respira hondo y abre los ojos, antes de comenzar a cantar el hechizo.

–Ocoros Mecante, Alegra Subditos. Olo Santire, Dis Et Brav.

–Creo que deberías escuchar a Taylor Swift. Quitárselo de encima-. Damon se burla. –Eres mejor como vampiro que como bruja, ¿sí?

Cuando está a punto de darse por vencida, de repente una pluma levita frente a Damon, dándole esperanza y una brillante sonrisa. Luego usa su magia para levitar varios más.

–¡Ups! ¡Parece que la bruja impresionante ha vuelto!– Damon observó con sorpresa y asombro cómo Kai le sonríe al rubio.

Zach está organizando una fiesta de eclipse en la pensión. Damon está hablando con Liz Forbes, quien le muestra una foto de la bebé Caroline.

–¿Puedo llamarte Liz?– le pregunta Damon.

–Seguro–. Liz sonríe.

–Tu hija es tan adorable–. Dice Damon mirando la foto de la pequeña rubia.

Liz se ríe. –Sí, Caroline es muy exigente, pero lo vale.